Mi TENTACIÓN

capitulo 12

Christian

— Estamos invitados a una fiesta, los Alphas de todas las regiones estarán allí ¿Quieren conocer a su Reina

— ¿Crees que es buena idea  llevar a victoria?

— Si llegamos sin ella comenzarán a hablar, tenemos que ir 

— Ahora hermano, la pregunta del millón de dólares, ¿Crees que ella aceptará? 

— Abra que preguntarle, de que nos lance un jarrón no pasa

— Recuerda eliminar todos los jarrones de la casa 

Ambos nos reímos  mientras nos disponíamos a buscar a Victoria,  ya había pasado casi un mes del accidente y desde entonces seguía sin hablarnos, la encontramos en el jardín comiendo una manzana mientras leía un libro, algo que estaba leyendo le causó mucha gracia pues soltó una pequeña risita, no se había percatado de nuestra presencia, así que nos quedamos viéndola un rato 

»No me cansaría de mirarla nunca«

»yo tampoco hermano, algo bueno tuvimos que haber echó para que la madre Luna  nos diera una compañera tan hermosa« 

— Estoy escuchando, y eso no me impresiona

— ¿ Como? ¿Éstas escuchando?

— No Estoy sorda 

— Lo se, es que es imposible, ¿a menos que? .. .

Estaba impresionado ¿Como podía oírnos?,  si estamos hablando por enlace mental, es muy extraño, definitivamente leeré ese libro que el chico me entregó

— Olvídalo, solo veníamos a preguntar algo

— Disparen 

— ¿Puedes acompañarnos a una Fiesta?

— No lo creo 

— Por favor Victoria, prometo que solo sera un rato

Me quede observando como David se sentaba a su lado y le rogaba como un cachorro, yo no lo haría que haga lo que quiera

— y tu Chistian ¿Quieres que asista?

— Es tu decisión

— Pídemelo 

— Ya David lo hizo

— Hazlo tu 

— ¿Sera que la Reina quiere hacernos el honor de asistir a una fiesta con estos simples lacayos?

Ella se puso de pie y se acerco a mi, tomo su libro y me dio un golpecito en el hombro y dijo

— El sarcasmo no te queda, si iré, solo por que estoy aburrida

Mujeres ¿Quien las entiende?......

— Pero por qué no baja ¿Y si se arrepintió?

— No lo hará, es una mujer ellas siempre se hacen de rogar

— Espero que no tarde porque....... ¡Madre Luna!

Seguí la mirada de David y mis ojos casi se salen de su cavidad, Victoria lucia maravillosa, tenia puesto un vestido rojo con un escote profundo y una abertura en una de sus piernas que le llegaba hasta el muslo, se veía como una Diosa, toda ella lo era, no podía apartar mi vista de su cuerpo, sus pechos lucían apetitosos 

— Hey... mis ojos están aquí, ¿Qué ocurre con ustedes nunca han visto una mujer con vestido? ni siquiera me han dicho ¿si me veo bien?

— Perfecta