Mi TENTACIÓN

capitulo 17

Victoria

Siento todo mi cuerpo pesado, no puedo moverme, me resulta casi imposible abrir los ojos, ¿Qué me ocurre? Pude escuchar las voces de preocupación de Christian y David, también escuchó la voz de Sam que me suplica que no lo deje, ¿Me estoy muriendo? No lo sé a ciencia cierta, pues solo recuerdo haber bebido un ponche en mi boda, y de allí no recuerdo nada más, solo puedo escuchar las voces, aunque solo en ocasiones, pues estoy tan cansada que me quedo Dormida con facilidad, no puedo moverme y eso me asusta y mucho 

— Mi Luna, no temas aquí estamos cuidándote 

David, quería gritar o al menos decir algo pero nada salía de mis labios, y ni un solo músculo se movía de mi cuerpo.

David

Cuatro Días, dos horas y treinta minutos tiene Luna en ese estado, me enloquece verla así, tan pálida, tan quieta, maldito veneno de mierda, pero ¿Quien coño se ha atrevido a hacerle algo así? Victoria a sido buena con todos,  solo queda una persona Dramón, infeliz perro bastardo, juro que si lo tengo enfrente lo destrozaría ahora mismo.......

— Deja de atormentarte hermano,  lo importante ahora es victoria, sea, quien se haya atrevido hacer esto lo pagara eso no lo dudes ni un instante, pero ahora debemos calmarnos por su bien, recuerda que puede sentirnos

  — Sólo quiero que despierte, aunque sea para echarnos de la habitación, hasta eso me haría feliz en estas circunstancias

— Debemos esperar, hay que ser pacientes 

Solo pude asentir, solo esperaba que victoria despertara pronto.....

Victoria

— ¿Cómo se siente Luna?

— Mejor aunque un poco débil

— No Es para menos

Y no lo era, había sido envenenada con un tipo de  veneno paralizante, he tardado casi dos semanas en mover todo el cuerpo con normalidad, pero aun no he dejado de sentirme débil, apenas doy pocos pasos y me canso,  el médico dice que es normal, y que todo poco a poco volverá funcionar bien

— Descanse, un poco le hará bien  

—Lo haré gracias Doctor 

—Que se mejore Luna 

— Gracias

Me quedé Sola un momento en la habitación hasta que entraron mis abuelos, la verdad no tenía ánimos de discutir 

—Hola mi niña ¿Cómo te sientes?

— Un poco cansada abuelo, pero bien 

— Gracias al cielo cariño nos has dado un susto de muerte 

— Si, todo fue un caos terrible Vicky Pero estas bien y eso es lo que importa

— Si..he y Holly

Mis abuelos se miraron entre si y luego bajaron sus cabezas  

— Abuela te hice una pregunta ¿Donde esta ella?

— Bueno, ella..... oh cariño ella

Su forma de hablar me asusto, yo era la culpable de que la hubiesen castigado por ayudarme 

— Por amor a Dios ¿que le paso? 

— Ella esta en el calabozo

— calla ella no lo debía saber, no hay por qué angustiarse