Avanzando A Tu Lado © (En Revisión)

CAPITULO 13: Amber (Parte 2): Decisión, Despedida Y Un Nuevo Comienzo

"Nada puede hacer que los sentimientos que tenemos hacia otra persona desaparezcan, ni el tiempo ni la distancia; ni siquiera nosotros mismos".

¿Cómo puedo estar segura de que todas las decisiones que he tomado hasta ahora son correctas? ¿Qué es lo que en realidad quiero?

Aún recuerdo el pensamiento que se formó en mi mente cuando me enteré de que Jason y su madre se habían mudado de la ciudad. En aquel momento creí que mi vida volvería a la normalidad. El chico que me había lastimado —en más de un sentido— se había ido, había salido de mi vida. Todo lo que quería... era olvidarme de él.

Sin embargo; me era inevitable el no sentir nada cada vez que veía su pupitre en el salón de clases, cada vez que me cruzaba con su antigua novia, o con alguno de sus amigos a la hora del almuerzo, cada vez que iba por alguna herramienta de mi padre al garaje y también, cada vez que miraba el lugar vacío de la mesa en donde él solía sentarse las noches que nos acompañaba a cenar.

Sabía que olvidarlo no sería sencillo.

Fue entonces que se me ocurrió una idea: cada vez que un recuerdo de Jason me venía a la mente; de inmediato pensaba en todo lo que me hizo. Eso provocaba en mí un gran enfado, y junto con ese enfado, venía acompañado un intenso sentimiento de desprecio. Utilicé ese método durante, Dios sabe cuánto tiempo, porque creí que me ayudaría a olvidar a Jason más rápido... pero no fue así.

Al cabo de unas semanas, comencé a tener una pesadilla recurrente. Parecía tan real, todas las noches revivía una y otra y otra vez ese horrible momento. La pesadilla era el mismo recuerdo que había estado utilizando como método de olvido. En el momento en el que despertaba, siempre estaba llorando. Después de varias noches sin poder dormir, mis padres me llevaron con el doctor Clark Dawson, o Clark, como le gustaba que se dirigieran a él.

Aún hasta el día de hoy, para nosotros, Clark no es solo un excelente doctor, también es un buen amigo de la familia. Nos brindó mucha ayuda, en especial a mí. Fue él quien se encargó de mi rehabilitación después de aquel "incidente" que me dejó en muletas.

Clark me hizo unos análisis, y después de revisarlos, dijo que no tenía ningún problema, al menos no uno físico, así que intuyó que mi problema debía de ser psicológico. Justo después de sentarse en su silla de doctor; me pidió que le contará qué había de nuevo en mi vida. Si había algo que me causara angustia, si había algo que me hiciera sentir triste o que me hiciera sentir enojada.

El tiempo me había enseñado que Clark era alguien en quien podía confiar, así que le conté todo. Pero por algún motivo, oculté el nombre de Jason, refiriéndome a él como "persona", algo tonto ya que Clark ni siquiera lo conoció. Le conté sobre los sentimientos que tuve la primera vez que vi, sobre la desilusión que tuve después de mi primer encuentro con él, sobre mi cambio de opinión al ir conociéndolo mejor, y sobre el día en el que nuestra amistad (si es que hubo alguna) terminó. También le platiqué sobre mi fórmula olvida personas. Al terminar de hablar, una de las cejas de Clark se elevó, dándome a entender que muy probablemente había encontrado el problema.

—Déjame entender esto. La pesadilla no te ha dejado conciliar el sueño, ¿es también el recuerdo que has estado usando para olvidar a esa "persona"?

—Sí.

—E imagino que los sucesos de dicho recuerdo no son nada agradables para ti ¿verdad?

—Obviamente no.

—Y esa "persona" a quien quieres olvidar es, por así decirlo, tu primer amor.

—Yo no lo llamaría así.