La esposa del director ejecutivo es la hija de un dios demonio

Capítulo 5: Padre e hijo

[Pasado: Hace cien años...]

"De ahora en adelante te llamaremos Zhen-Zhen porque eres precioso para mí y para tu madre". Zu Wan dijo suavemente mientras le daba un nombre a su hija.

Como si entendiera lo que acababa de decir su padre, la niña sonrió mientras levantaba sus pequeñas manos para agarrar el pulgar de su padre.

"Parece que está feliz con el nombre que le diste, Wanwan". Eva se rió al ver la brillante sonrisa de su hija.

Zu Wan se sintió orgulloso después de escuchar eso. "Por supuesto, era de su amoroso padre, después de todo, así que a ella realmente le gusta. ¿Estoy en lo cierto, mi angelito?"

'Qué ironía, soy un demonio y estoy llamando a mi hija angelito.' Zu Wan se rió por dentro de ese pensamiento.

Eva se limitó a sacudir la cabeza mientras miraba a su marido, que volvía a sonreír tontamente. Él nunca dejaba de divertirla a medida que pasaba el tiempo.

Habían pasado varios meses y su pequeña demonio linda... o más bien el angelito lindo estaba creciendo muy bien.

Eva se sorprendió al ver que Zhen-Zhen se desarrollaba y crecía tan rápido en comparación con otros niños normales.

Después de tres meses, el niño podía estar solo sin su ayuda.

Después de cuatro meses, la niña ya podía caminar sola.

Y ahora que Zhen-Zhen ya tenía cinco meses, parecía que ya podía entender de qué estaban hablando los adultos.

A veces, podía ver a su hija mirándolos cuando ella y Zu Wan estaban conversando.

Zhen-Zhen parecía escuchar atentamente y podía entender lo que decían.

Sentía envidia de su esposo porque parecía que su hija estaba mucho más cerca de su padre que ella.

A veces, los atrapaba mirándose fijamente como si estuvieran hablando usando solo sus mentes. Se preguntó qué estaba pasando entre su esposo y su hijo.

Sin que ella lo supiera, la razón por la que Zhen-Zhen le tenía mucho cariño a su padre era por su vínculo secreto que Eva no conocía.

El padre y el niño estaban haciendo algo a espaldas de Eva, especialmente si dejaba que el padre y el niño deambularan por la montaña sin su presencia.

"¡Fa-fa vuela... vuela... vuela!" Zhen-Zhen le dijo a su padre Zu Wan mientras ella levantaba los brazos hacia él, dándole la señal para que la cargara.

Zu Wan se rió entre dientes al ver a su lindo angelito haciendo eso.

"¿De verdad quieres volar con papá de nuevo?" Zu Wan le preguntó.

Zhen-Zhen asintió vigorosamente mientras le sonreía a su padre con mucha dulzura.

Zu Wan no pudo contener la risa al ver a su pequeña y linda hija suplicándole así.

"Oh, mi lindo angelito... eres tan adorable". Dijo Zu Wan mientras pellizcaba su hermoso rostro.

"¡¡Fa-fa, vuela!! ¡¡Cielo!!" Zhen-Zhen pronunció de nuevo mientras señalaba el cielo a su padre. Parecía muy ansiosa y emocionada.

Zu Wan solo la miró impotente.

"¡Vuela! ¡Vuela! ¡Vuela!" Esta vez, Zhen-Zhen insistió porque se sentía un poco impaciente ya que Zu Wan no se movió de su lugar.

Zu Wan estalló en otra ola de risa. Su impaciencia era uno de sus comportamientos comunes, verdaderamente el padre y el niño eran iguales.

"Está bien, volaremos hacia el cielo junto con esas aves si completaste la tarea que te di hoy, Zhen-Zhen".

Zhen-Zhen solo asintió hacia él, sintiéndose tan esperanzado.

"Está bien, muéstrame lo que tienes, mi angelito. Si el padre está satisfecho con tu desempeño hoy, cumpliré tu deseo". Dijo Zu Wan mientras la animaba.

"¿Estás listo para mostrarme lo que has aprendido hoy Zhen-Zhen?"

"Uhm" murmuró Zhen-Zhen mientras asentía con la cabeza una vez más. Zu Wan pudo ver la determinación en sus ojos azules.

El lindo angelito que se veía tan emocionado y ansioso hace un rato ahora tenía una expresión seria.

Estaba concentrada mientras miraba fijamente sus dos pequeñas manos. Zu Wan solo la estaba observando con una sonrisa en su rostro.

Segundos después, algo del tamaño de una manzana apareció en sus pequeñas manos, una luz naranja bailaba en ambas manos.

Era un fuego naranja. Zhen-Zhen pudo liberar uno de sus poderes.

Zu Wan dejó escapar una risa suave mientras observaba a su hija completar con éxito la tarea que le había encomendado.

Zhen-Zhen miró a su padre con una sonrisa triunfante que decía 'Padre, lo he hecho. Deberías cumplir mi deseo hoy.

"Buen trabajo, Zhen-Zhen. Aprendes rápido. Fa-fa está muy orgullosa de ti". Zu Wan la elogió mientras pellizcaba nuevamente sus dos hermosas mejillas.

Zhen-Zhen saltó de alegría porque estaba emocionada de volar nuevamente en el cielo junto con su padre.

Este fue el tipo de tiempo de juego y momento de unión del padre y el niño a espaldas de Eva.

Zu Wan le estaba enseñando lentamente a descubrir y controlar su poder.

Sabía que su hija, aunque mitad humana y mitad demonio, eventualmente adquiriría algunos poderes extraordinarios.

Ella era una hija de un dios demonio después de todo.