Descripción:
Vendida por su propia abuela para convertirse en esposa compartida de los pobres hermanos Ye por veinte taels de plata, Liu Duo, no dispuesta a sucumbir a su destino, escapó en la noche. Se resbaló, cayó y murió de una muerte inexplicab...
De vuelta a casa, Liu Duo se paró frente a Ye Liu y giró a su alrededor, "Mira, Ling, ¿esto se ve bien?"
Lo había notado, pero no había encontrado la oportunidad de decírselo, por lo que asintió, "Muy agradable. Te ves bien en lo que sea que te pongas, Duo".
"Por supuesto. ¡Estamos hablando de mí!" Liu Duo estaba muy orgullosa de sí misma. Estaba extraordinariamente feliz de tener ropa nueva.
Por lo que parece, esta prenda no había sido barata, pero Ye Ling no dijo nada. Mientras Liu Duo estuviera feliz. Siempre podía ahorrar dinero en secreto en medicinas, o no consumir tanto (Nota: Pobre Ling (☹).
"Ling, escucha, tendremos dinero en unos días, jaja. ¡Entonces podemos comprar ropa nueva para ti, para todos!"
Ye Ling dudó y estaba a punto de preguntar por qué cuando Liu Duo interrumpió: "No me preguntes por qué. Te lo diré cuando llegue el momento. ¡Considéralo una sorpresa!"
Como eso fue lo que dijo, Ye Ling no investigó más. Él asintió.
Se dio la vuelta y sacó los platos de la olla y los puso sobre la mesa. Lo primero que hizo Liu Duo cuando llegó a casa fue entrar en el baño y cambiarse la tela.
Al salir, lavó el usado y lo colgó en la cuerda. Murmuró para sí misma: "La próxima vez que cambie la tela no debería quedar nada. Ya han pasado unos días".
Cuando cambió la tela en ese momento, solo tenía un poco.
"Duo Er, ven a comer", llamó Ye Ling. Había puesto los palillos listos.
"En un momento."
En la mesa, miró con curiosidad, "Ling, ¿por qué hay un huevo en mi tazón?"
De los cuatro cuencos, solo el suyo tenía un huevo.
"Cuando fui a la casa de la tía Ye para pedir prestada una almohadilla de tela, ella me dio diez huevos y me dijo que son un suplemento para ti, así que frité uno para ti", respondió con una sonrisa. La tía Ye fue tan buena con ellos.
"Oh", pensó Liu Duo. La tía Ye y su familia los trataron muy bien. Deberán presentar sus respetos cuando tengan dinero.
En la familia Ye, solo el tío Ye y la tía Ye los trataron bien.
Liu Duo dividió el huevo en cuatro pedazos y le dio un pedazo a cada uno de los tres hermanos. "Aquí hay un poco para todos. Comparto lo que tengo. Soy una buena chica".
También dividió su arroz para todos.
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"Duo Er, aquí lo tienes. La tía Ye dijo que es un suplemento para ti", Ling tenía la intención de devolverlo.
Liu Duo respondió: "¡No hagas eso, o me harás enojar!"
"Solo cómelo, Ling. Esta es la buena voluntad de Pequeña Duo. Es mejor no decepcionarla". Ye Liu tomó su huevo y se lo comió, seguido de un comentario: "Wow, esta pieza del amor de la pequeña Duo sabe increíble. Es absolutamente maravilloso".
Liu Duo puso los ojos en blanco. Allí fue, bromeando de nuevo.
Incluso su propio hermano lo dijo. Ye Ling decidió no empujar el asunto, y también se comió el huevo. Solo Ye Mo seguía mirando el cuarto de huevo en su tazón, sin recoger sus palillos, como si pudiera cambiarlo en una flor.
Fue solo cuando Ye Liu fue a por su segundo tazón que Ye Mo comió su huevo. Ye Liu lo miró, sin decir una palabra. Había algunas cosas que Ye Mo tenía que decidir por sí mismo.
"Se siente bien estar lleno", dijo Liu Duo con un aire de satisfacción. "Correcto, Liu, ¿encontraste algún trabajo adecuado cuando estabas en el callejón?"
"Hay algunos, pero no tengo la intención de ir". Ye Liu dejó sus palillos. "Voy a ir allí de nuevo mañana para encontrar más".
Cuando Ye Liu se dio cuenta de que Corpulento Du se había inscripto para el trabajo que quería, renunció a la idea. Corpulento Du insistió en que él también se inscribiera, pero él se negó, por lo que escaló a lo que había sucedido más temprano.
Liu Duo no preguntó más, porque había adivinado por qué. "Entonces, ¿qué haremos más tarde?" Sin televisores ni teléfonos, la vida era aburrida.
Ye Mo habló esta vez: "Voy al arrozal para desmalezar. Es marzo, así que es hora de plantar un poco de arroz".
"Pequeñs Duo, vamos más tarde, para que no te aburras", sugirió Ye Liu.
"Está bien". Mantenerse ocupado con el trabajo era una buena manera de pasar el tiempo.
Después de que Ye Ling limpió los cubiertos y sacó su canasta, los cuatro se dirigieron hacia el arrozal.
