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Pedido para el gordofóbico
Pedido: ElSebastianse pajea en la escuela y el Randal y la reader lo cojén.
Advertencias/aclaraciones: sexo semi-público ✰ Reader humana ✰ voyeurismo (excitarse por ver/que te vea la gente teniendo sexo) ✰ Reader dóminante x Randal sumiso y Sebastian versátil ✰ sadomasóquismo entre Reader y Randal (reader sádica y Randal masóquista) ✰ reader gordita ✰ uso de magía.
Palabras: 3255
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El tiempo desde que se fue el pelirrojo de rulo pásaba lento, ¿estaba bien? Parecía apúrado por salír, y completamente cuidadoso con móstrar su entrepierna, ocultando la parte del cuerpo con ciertas poses que no serían tan sospechosas sino fuera por su evidente nerviósismo. Y tú no nótaste su olor córporal, pero cierto pelirrojo si; y habia sentido cada sensación cálida que sóltaba su cuerpo, oliendo todo como si no pudiese tener suficiente de eso.
Habia tanta gente en su salón, pero solo podía sentír la sangre caliente proveniente de dos personas, tanto calor córporal que Randal podía sentír. Su cuerpo se movió con un escalofrío, mientras sóltaba una risita silenciosa ante la reacción de su cuerpo. Te volteo a ver cuanto tú fingías prestar atención, pero solo querías que sónara el timbre para ir a buscar al colorado pérdido. Te había visto muy pegada a Sebastian estos últimos días, no te le hacías tan mal... quízas pueda llevarte a casa. ¡Dos personas con sangre absolutamente fresca no estarían mal!.
Vió todos tus pasos hasta que tu cuerpo traspasó la puerta, intentó ver más, pero la pared impedía ver más alla de esta.
☆
Buscabas al chico por todos lados, hasta el baño de hombres para verificar que no esté teniendo un problema. Pero no estaba, inclúso si gritaras su nombre después de verificar minuciósamente que no habia nadie para verte, aunque podías sentír una mírada penetrante encíma tuyo, pero cuando volteabas nunca habia nadie. La sensación te perseguía a travéz de todos los pasillos, y también todos tus intentos de encontrar a el pelirrojo en algúno de los salónes de clases. Tu búsqueda se estaba tornando estresante, ¿dónde estaba Sebastian? Eso quería saber, ya que los lugares para esconderse estaban disminuyendo, y solo quedaban unos cuantos salónes para abrir.
