¿Qué paso ayer? 2/2

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Diciembre 27 _ 5:00 pm

Narra Lauren J.

- ¿no crees que con eso basta?- cuestione hacia Camila quien hacia su muñeco de nieve delante de la casa.

- nunca es suficiente cuando se trata de mi propio Olaf de nieve- demando mientras yo seguía juntando pequeñas esferas de nieve para que siguiera colocándole relleno a su "olaf"

- no sabia que olaf media 1.50 - insistí dudosa de si era buena idea que fuera un muñeco tan alto.

- Déjala, le gustan las cosas grandes -miré hacia Dinah quien guiñaba un ojo hacia mi -

- Hey, te estoy escuchando- se quejo Camila quien le lanzó una bola de nieve.

Después de a ver visto a los alces Camila y yo habíamos regresado a la casa. Durante todo el camino insistió en que quería un reno como mascota y me negué rotundamente a esa idea, sabía que Camila + un alce, no sería una gran idea, después de deshacerse de la idea decidimos hacer un muñeco de nieve, normalmente todos los años yo solía hacer uno pequeño cuando veníamos de vacaciones pero este muñeco sobrepasaba a todos los que había hecho. Las amigas de Camila decidieron sumarse a la idea, normalmente se la pasaban encerradas y después de la primera vez que las conocí pude verlas interactuando juntas.

Flashback (recuerdo)

- Ella es Lauren, mi novia- escuche a Camila presentarme a sus amigas -

- Cuando Camila dijo que tenía una novia no lo creí, pero wow, si eres linda- escuche a la rubia halagar mi imagen, la morena a su lado le metió un codazo lo cual me causó gracia. -pero tu eres mucho más linda chocolatito- Camila omitió las demostraciones de amor de sus amigas y prosiguió.

- y ellas son, Normani, Dinah y Ally- escuche la voz de Camila a mi lado mientras yo me acercaba a saludar a cada una de sus amigas, este había sido un día bastante alarmante para mi, creí que no conseguiría a alguien antes de la hora del vuelo, por suerte madre decidió ir antes al aeropuerto por ciertos papeles que le faltaban, estuve bastante nerviosa durante todo ese tiempo, di vueltas por todos lados intentando buscar una solución a mi problema, logre hablarle a una amiga para que se hiciera pasar por mi novia pero ella no iba a poder viajar con nosotros y eso arruino mis planes colocandome tras las cuerdas.

Estas eran mis últimas horas antes de confesarle a mamá que realmente jamás existió una novia y que había mentido durante todo este tiempo, y entonces sucedio, por arte de magia apareció una linda chica delante de mi.

Ella era un poco más baja que yo, pero me servía, era de contextura delgada, su piel era linda, ella era linda, era perfecta, cuando la escuché halagar mi ropa no tenía que pensarlo más, me aventé con todo el valor del mundo para pedirle que fuera mi novia, no me importo si quedaba como una lanzada o algo por el estilo, realmente había estado cruzando los dedos momentos antes para encontrar a alguien y que apareciera fue cosa del mero destino, después de convencerla del trato me confesó que habían tres chicas más que venían con ella. Decidí ir a conocerlas, no podía dejarlas aquí, todo estaba perfecto, tenían boletos a cualquier destino, gracias a eso y a que tenían maletas con ellas logré convencer a madre de que ellas venían conmigo.

El boleto de Camila tuvo que ser vendido pues yo ya tenia un boleto extra que estaba a mi lado del avión, gracias a ese detalle también fue perfecto congeniar con Camila, hablamos todo el rato en el avión, necesitaba conocer a esa chica, sentía miradas sobre mi, y cada que podía miraba disimuladamente hacia atrás, las amigas de Camila nos observaban todo el tiempo, me causaba cierta gracia, había atrapado más veces a la más pequeña de ellas mientras Camila y yo hacíamos algo.

Una novia de mentira, ¿qué podría salir mal?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora