❝ El lado dulce de la química ❞ || MiChaeng

𓏲 Capítulo 15

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Al día siguiente, antes de levantarme le mandé un mensaje a Sana preguntándole si quería pasar el día conmigo.

"¿Quieres venir a mi casa?"

"Lo siento, tiempo de novia"

"Me dan asco"

Entonces recurrí a mi segunda opción: Momo. Ella no tenía a nadie y estaba en la misma situación sentimental que yo. Después de enviarle un mensaje, iba a vestirme cuando oí voces desde la sala.

Tal vez mamá estaba haciendo el desayuno.

Salí de mi habitación a ver qué estaba pasando. A medida que me acercaba oí la voz de Jeongyeon, ya común en casa, no esperábamos visitas así que me paseé con mi pijama de tigre.

Lo que definitivamente no esperaba era ver a Mina en la sala hablando y riendo con Jeongyeon.

Ambas notaron mi presencia, Mina rió entre dientes— Hola pequeña tigre —me saludó.

— ¿Qué estás haciendo aquí?

— Jeong me invitó. Vamos a pasar el rato si quieres unirte.

— Jeong, ¿Puedo hablar contigo a solas? —dije en un tono dulce con los puños apretados.

— Uh, seguro.

En el momento que la llevé a la cocina, le pegué con mi puño en el brazo— ¿Qué demonios le pasó a la Jeong de anoche? ¡Ahora estás invitándola a pasar el rato!

— Lo de anoche fue una prueba.

— ¿Una prueba?

— Una prueba para ver si ella aguantaba mis acciones y se quedaría contigo a pesar de todo. Mina lo demostró ayer por la noche y quiero conocerla un poco más.

— ¿No querrás decir golpearla?

— No soy tan mala, Chaeyoung.

— Al menos podrías haberme dicho que vendría.

— ¿Por qué? Te ves linda así —pellizcó mis mejillas, le di un pisotón y abrí la puerta de la cocina.

Hice caso omiso a la presencia de Mina y regrese a mi habitación. Me quedé mirando el espejo durante unos minutos, sorprendida por mi apariencia. Tengo un arbusto en la cabeza, los ojos hinchados, baba seca en la boca y lo peor, el pijama de tigre.

Después de ponerme algo decente; tomé las llaves y bajé a la sala.

— ¿Me vas a dejar tan pronto?

Mina me sorprendió por segunda vez en el día.

— Sí. Momo va a venir y tengo que comprar comida.

— No quiero quedarme sola con Jeong. No me malinterpretes, es sólo que... —se rió con nerviosismo—, es rara

— No te preocupes, no va a matarte.

— ¿Y si lo hace?

— Voy a vengar tu muerte.

— ¿Ah, sí? ¿Y desde cuándo te importo lo suficiente para hacer esas cosas por mí? —su voz adquirió un tono de broma, pero también mezclado con ternura.

Di un paso adelante y me di cuenta de lo que cerca que estamos. Quise acercarme más, pero sabía su juego. Le gusta provocarme y ponerme nerviosa.

— Nunca dije que me importaras —dije en tono de burla, entonces le di un codazo y la dejé de pie sola

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— Eso es gracioso.

Momo y yo estamos pasando el tiempo en mi habitación, porque la sala está ocupada por Jeong y Mina. En cuanto llegó le expliqué lo que pasó esta mañana

— Cálmate Chaeyoung—Momo sonrió—, probablemente pensó que te veías sexy.

— Sí, claro. Ella piensa que las pijamas de tigres son sexys.

— ¿Chae?

— ¿Qué?

— ¿Quieres que te encuentre sexy?

— ¡No!

— Sólo admite que ella también se enamoró de ti

— Ella no me gusta.

— ¡Dios mío, eres tan tonta como Mina! — gritó.

— ¡Shh! Baja la voz.

— ¿Están bien? —las dos miramos a Mina que en algún momento abrió la puerta.

— Sí, sólo cosas de la vida, no entenderás —respondió Momo.

— Supongo —tal vez estoy exagerando pero tengo la sensación que escuchó parte de la conversación— Bien —se aclaró la garganta incomoda — sólo vine a decir que ordenamos pizza. Si desean comer bajen ahora mismo porque Jeong esta hambrienta y comienzo a asustarme.

Momo y yo le dijimos que haga un pedido a parte, ella asintió y cuando estaba por cerrar la puerta le lancé una bolsa de Skittles— Vive un poco.

Mina rió y volvió con Jeong.

— Ustedes hacen linda pareja —dijo Momo.

— Ni siquiera le gusto. Es una idiota sarcástica —luego de un momento añadí—, una idiota sarcástica muy linda — enterré mi cara en la almohada.

— Hormonas —murmuró Momo— ¿Por qué no le dices lo que sientes y le preguntas si siente lo mismo?

— No estoy admitiendo nada.

— Ya veo, aún estamos en la negación.

— ¿Qué hay de ti y tu chica?

Su felicidad se esfumó— Creo que me odia.

Cuando la pizza llegó; Momo me arrastró a comer con Jeong y Mina, mientras veíamos una película. Momo tomó todo un sofá para ella solo descansando sus pies en el regazo de Jeongyeon, prácticamente estaba obligada a sentarme junto a Mina

De repente, ella tomó un repentino interés por mi pizza— ¿Puedo probar?

— ¿Disculpa?

— Nunca he probado la pizza Margarita.

— Sí —le entregué un pedazo si tocar, pero en cambio ella toma la pizza que estaba comiendo. Momo nos miró sonriendo, ya sé que cosas está pensando.

— Gracias.

— ¿Y? ¿Te gustó?

— No está mal.

— Más para mí —vacilante tomé otro trozo de pizza pero Mina tomó mi mano, su cara estaba tan cerca. Ella miró hacia ambos lados y con su boca arrancó un gran pedazo de mi pizza.

Me quedé mirándola con incredulidad.

— Mina...

— Shh, la película —dijo antes que pudiera protestar.

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