Capítulo 7

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Lamento mucho el retraso de este capítulo, febrero ha sido un mes un poco duro de sobrellevar, pero por fin estoy de vuelta.
Gracias también como siempre a mi querida Celia-Sharp que me ha ayudado mucho a que este capítulo finalmente viera la luz.

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-De acuerdo, pues quedamos así... Le agradezco mucho la oportunidad, le aseguro que no se arrepentirá... Sí, eso espero yo también, realmente creo que será muy bueno... Sí, usted también, gracias otra vez... Bien, adiós.

Héctor colgó el teléfono y miró con orgullo a Paolo.

-Ya es oficial, el viernes por la tarde, mis chicos jugarán un amistoso contra otro equipo.

Paolo no pudo evitar emocionarse.

-Eso es fantástico. Me alegro muchísimo por vosotros.

-Es gracias a tí que van a hacerlo. Se lo diré en el entrenamiento de esta tarde, si quieres venir, eres más que bienvenido, además así me ayudarás a decírselo.

-Estupendo, ahí me tendrás.

Cuando finalizó el trabajo del día, los dos futbolistas decidieron ir a tomar un café antes de la hora de entrenar, aprovechando que ese día empezaban más tarde.
Sentados en el banco de un parque, su conversación fluyó como la seda, simplemente recordando viejas anécdotas personales relacionadas con sus años jugando al fútbol después del FFI. Paolo disfrutó especialmente hablando de sus vivencias en los diferentes clubes deportivos en los que había estado. 

-A los 15 años me fichó el Italian Knights, un club deportivo de mi ciudad, ahí me mantuve durante dos años y medio, luego, el equipo Red Woods me ofreció unirme a sus filas, aunque solo estuve un par de meses, luego tuve que irme por cuestiones personales y estuve un tiempo fuera del mundillo. Poco tiempo después otro equipo de mi ciudad me fichó y así regresé al fútbol, el equipo se llamaba Dark Tiglons pero se disolvió unos años después, finalmente regresé al Red Woods, donde me quedé un tiempo hasta hace poco. 

-¿Y por qué razón te fuiste?

Paolo dudó durante un instante sobre si seria buena idea hablar del tema. No había mencionado nada relacionado con aquella experiencia desde que sucedió. 

¿Quizás había llegado el momento de hablar de ello?

-Verás, yo tuve una pareja, se llamaba Chiara, habíamos estado juntos desde hacía unos tres años. Ella era buena chica, pero siempre tuve la impresión de que estaba muy poco interesada en nuestra relación. Pocos meses antes de romper, ella y el capitán de mi equipo empezaron una amistad, al final, resultó que habían estado manteniendo un romance en secreto prácticamente desde que se conocieron. Cuando lo descubrí, el capitán me echó a patadas del equipo y Chiara decidió hablar mal de mi y de nuestra relación a todos sus amigos, en resumen manchó mi imagen por completo. Después de todo aquello, mi tío me recordó que iba a realizar este viaje, por lo que decidí venir con él. 

En fin, ya estaba hecho, ya no había marcha atrás. 
Lo que más impactó a Paolo, fue la cara de Héctor en ese momento. Mostraba compasión. 

-Vaya, menuda faena. La verdad es que no sé qué decir. Debió ser duro para tí.

Paolo suspiró antes de responder.

-Bueno, la intención ahora es olvidarme de todo y volver a empezar. Creo que poco a poco lo voy consiguiendo.

El moreno le entregó una gran sonrisa.

-Me alegro por tí. En fin, será mejor que vayamos tirando para llegar a tiempo.

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