Playground - F1!

- Charles Leclerc -

En sí, siempre había existido la tensión entre él y yo, pero nunca estuve segura si era tensión negativa u otro tipo de tensión, un poco más íntima, por llamarlo de alguna forma. Pero claramente no podría ser, yo era la 'princesse' de mi hermano y evidentemente no le agradaría la idea de ser "corrompida" por su mejor amigo, por lo cuál, siempre hubo una gran barrera entre nosotros.

Pero eso no nos impidió intentarlo. Puesto que en dado el momento, ninguno de los tres pudo evitar que los sentimientos explotaran. Y nos lleve a esta situación.

Pierre persiguiendo a Leclerc, gracias a que lo encontró en mi cama, en paños menores; no era la mejor vista, al menos no para él.

-¡Te dije que con ella no! ¡Ven aquí Charles!- gritó corriendo aún detrás de él- ¡¿Por qué con ella?!- observaba como ahora no solo corría detrás de él sino que también comenzó a lanzarle lo que encontraba en su camino.

-Pierre, escúchame, por favor. Te lo juro que lo puedo explicar- ninguno de los dos paraba de correr en círculos por toda la habitación. -¡Perdón!- y antes de poder continuar ambos cayeron al suelo mientras dejaban salir un pequeño "auch".

Mi hermano intento abalanzarse sobre Charles, así que tuve que interceder. No quería que ninguno de los dos saliera lastimado.

-Pierre, basta. Por favor.- me acerque a él mientras lo jalaba hacia mi -Escúchame ¿sí?, por favor enfant- a regañadientes logré separarlos.

-Bien, están bien, te escucho. Más vale que sea una buena explicación- exigió mientras le lanzaba algunas prendas a Charles. -Y tú vístete, bête.- suspiro mientras se dejaba caer en el pequeño sillón que había en mi habitación. -Te escucho Amélie.-

No sabía cómo comenzar, aparte él nunca me llamaba por mi nombre, no era el momento pero sentí un nudo en la garganta y algunas lágrimas invadiendo mis ojos.

-Perdón...- fue lo único que pude formular.

-No Amélie, no quiero que pidas perdón, quiero que me digas el porqué y cómo.- su voz también temblaba. -¿Por qué no me lo dijiste?.-

-Te hubieras enojado y no quería que estuviéramos mal.- no pude evitar dejar salir algunas lágrimas. -Estaba asustada de que no estuvieras de acuerdo. No sé, no quería que te alejaras de mi.-

-Jamás haría eso y lo sabes.- en lugar de continuar con la discusión me abrazo e hizo que me sentara a su lado. -l'aimes-tu vraiment...?-

-Oui je l'aime...-

-Bueno, está bien. Supongo que dentro de lo que cabe, él es mejor partido para ti.- dijo aún abrazándome y dejando un pequeño beso en mi frente. -Fue en la fiesta de Mónaco ¿verdad?-

Sí, había sido en esa fiesta que todo empezó.

...

Estábamos en Mónaco y mi hermano había aceptado llevarme a la fiesta a la que iba a ir, dijo que habría varios pilotos ahí, incluido su mejor amigo, Charles Leclerc.

Él cuál por cierto, detestaba con todo mi ser, a mi parecer no era la gran cosa; quiero decir si es guapo, atractivo, alto y gracioso, también es muy talentoso, sus ojos son de los más lindos que he visto... bueno, quizá no lo detestaba tanto, pero ese no era el punto.