Una nueva jóven llegaría al instituto japonés más codiciado por los aspirantes a héroes desde generaciones antiguas entre ellos los actuales miembros del curso 2-A. Ella era tan solo un ser más, entonces...
¿Por qué causaba tanta conmoción?
¿Quién...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
— Así no te volverás más fuerte tonto — suspira ____ extendiendo su mano hacia el peli verde.
— No esperaba lo último — rie apenado, el elevó su mirada de verdoso color para admirar el rostro sudoroso de su nueva entrenadora — All migth sensei me quiere matar.
— No debiste romper su mini escultura del 89 — Hinca sus hombros restando importancia a la extraña ofensa.
— ¡Chicos! — Una sonriente castaña se alza del suelo para arrimarse sobre una poco cansada rubia.
— ¿Por qué tan feliz? — se rie la más alta de las dos, uraraka le mira sin quitar su sonrisa.
— te conseguí una cita~ — su canturreo congeló a ambos adolescentes.
Había transcurrido un mes y días desde la llegada de la rubia chica, fue todo un reto su adaptación en el mundo de los normales que al fin las cosas parecían calmarse, pero gracias a las extremas experiencias vividas el curso se unió aún más e incluyeron finalmente a la rubia como una más del grupo.
Hace unos días finalmente salió a la luz el compromiso de la rubia con el héroe, lo que logró permitir que el acosador de su peli rosada amiga, bastante confiado, se pusiera en marcha con su plan evidente. Apenas explicó a su clase los motivos de su nuevo acuerdo con el héroe ellos se pusieron en marcha para ayudar a resolver lo más pronto posible la situación.
Nunca esperó que la joven fémina de castaños cabellos demorará sólo tres horas en conseguirle una persona poco cuerda que aceptará meterse en tal escándalo.
— ¿Con quién? — habla ahora el peli verde, se encontraba serio mientras estiraba un poco.
— Mirio senpai, escribí sobre la cita doble que se quería realizar a una amiga y ella movió sus hilos — confiesa la castaña para mirar de lado al peli verde chico.
— tu amiga es Hado senpai — el razonamiento de la rubia puso nerviosa a la pobre castaña quien alzó la vista.
— Nejire-san me rogó que no dijera su nombre, hasta me ofreció su vestido — murmura entre lágrimas, apenas pudo hacer un trato negociable con la peli celeste y fue roto en solo segundos.
— ¡Uraraka! — una molesta peli celeste se acerca al lugar con un aura aterradora.
— ¡Ah! Sálvame ____ — rogó la más joven sin quitar su vista de la nerviosa rubia.
— ¡Hey Hoda senpai! — saluda ____ amable escondiendo con ayuda de su don a la castaña la cual buscaba huir.
— ou, ___, perdón pensé haber visto a Uraraka — parpadea un poco confundida rascando su nuca, suspira algo apenada antes de reír — pasan que cosas. Oh, hola Izuku.
— Hola — aún en el suelo el más adorable del grupo sonríe tímidamente.
— ay — la castaña sujeta su falda con vergüenza, sus sentimientos apenas estaban siendo aclarados para que ahora el peli verde volviera a confundirla — esto no se ve bien — refunfuña.
