₊°.•𝐇𝐎L𝐌𝐄𝐒 • ₊˚.
[ Me gustas, por tu cabello
castaño, por tus ojos curiosos
cada que ven algo desconocido.
Me gustas tú, no Sherlock.]
Donde una chica
está en busca de
su madre.
O
Donde sin querer...
Al final Enola decidió tocar la puerta y esperamos unos pequeños segundos y esta se abrió encontrándome así con la suave mirada del castaño...
─Necesitamos tu ayuda.─Hablé rápidamente y al ver su mirada de confusión y con motivos de hablar interrumpí.─No me hagas repetirlo.─Solté un leve suspiro.─¿Podemos pasar?
─Si, claro...─No era el momento, pero su mirada de confusión era demasiado tierna para mí gusto.
─Bueno, en primero...Quiero disculparme por bastantes cosas, digo.─Dije al entrar por completo a su "humilde" morada.─He errado al notar varios aliados evidentes, y también...─No pude continuar porque Tewksbury me interrumpió.
─Aleen.─Me miró.─también tengo que decirte algo, es importante.─Ahora se dirigió a Enola.─¿Te importaría...?
─No, claro. Esta bien...Tal vez dé un recorrido.─Sonrió levantando un poco su falda y se fue del lugar.
─Sientate─Ordenó y yo lo miré mal.─Aleen, por favor.─Accedí con una sonrisa burlona y delicadamente me senté.─Todo los benditos días, lo único que hago es ceder, si voto por el proyecto de Lord que les permitirá bombear agua sucia a un lago...─Me volvió a mirar, pero esta vez un poco serio.─¿Me estás prestando atención?
─Sisi, continua...
─Ok, digo, ¿Donde me quedé?
─En que les permitiría bombear agua sucia a un lago limpio.─Le miré con una ceja alzada y una sonrisa burlona.
─Ah. Sisi. Quiero levantarme y decir, "esto no está bien", pro no tengo aliados.─Bajó la mirada.─Hacerlo sería arriesgar todo, así que; aveces no duermo tratando de ver que camino seguir. No estoy buscando una esposa.─Negó y yo le miré expectante.─Porque la política me consume.
Le sonreí y coloqué mi mano encima de la suya.
─Eres un buen hombre.
─¿Ahora sí soy un hombre?─Me miró sonriendo y entendí su punto inmediatamente.
─Solo...En ocasiones.─Bromeé
Y luego de unos segundos mirándonos estallé en risas que fueron acompañadas instantáneamente por las carcajadas de Tewksbury.
─De verdad entiendo tu sufrimiento.─Me puse sería luego de unos minutos.─porque yo también sufro...Y perdón por no hablarte de esto, es que─Dejé la frase en el aire.
─Tienen un caso que resolver.─Afirmó y yo asentí.
─La chica a la que estamos buscando se llama Sara Chapman. Tiene pruebas de que están muriendo las que trabajan en la fábrica por el producto, el fósforo. Sin embargo, la fábrica intenta cubrirlo diciendo que es una enfermedad llamada tifus. Y ella lo sabe, por eso creemos que la buscan para asesinarla.
─¿Y qué podemos hacer?
─¿Tu, Enola y yo?─Pregunté confundida, y el me iba a responder, pero un toque en la puerta nos hizo mirar allá.─Por favor no abras...puede ser la policía.─Dije en un susurro.
─¿Aún te busca la policía?
─Pues sí, tú viste como me arrestaron, ni modo que tenga mucho dinero para que alguien me pague el rescate. ─Dije con sarcasmo y luego rodé los ojos.─Pues sí. Escapé con ayuda de Enola.
─¿Escápate de la cárcel?─Preguntó alarmado y yo le dí un golpe en la cabeza.
─Shhh. Baja la voz.
─Aleen, si no abro esa puerta sospecharan más.─Tenía razón.─Anda, escondete.
Por primera vez hice caso a lo que Tewksbury me había dicho y me escondí en un arbusto y al instante ví a Enola. Le reñí con la mirada pues no podía hablar.
─Señorita Cicely...─Ahora sí que me he sorprendido.
─Perdón por venir a esta hora.─Se disculpó y empezó a tallar su vestido.
─No se preocupe yo le pedí que viniera.─¿No podía estar más sorprendida en este día? ─Quiero ayudar, pero es que...
─¿Hay alguien más aquí?─"No" Tewksbury negó rápidamente y cerró la puerta.
─Bien...Es mejor que estemos solos.─Le miró por unos segundos y luego dirigió la mirada a los arbustos. La devolvió a Tewksbury.─Es muy importante que yo hable con usted, creo que usted es un buen hombre.─Si lo es, pensé.─y digno de confianza, y por eso quiero confesarle algo que tal vez lo impresione.
─Señorita, Cicely. Tal vez podemos..─Fue interrumpido.
─He querido hablar con usted sobre una relación.─Afirmó la chica seria.
─Ah, eso. Sí, tal vez lo discutamos en otro momento.
─Por favor, Señor...─Insistió.
─Lo siento muchísimo─Hizo una leve inclinación.─La acompaño afuera.─Abrió la puerta.─Si estoy interesado hablaremos después.─Le dedicó una leve sonrisa la chica musitó un "gracias" y se fue.
Salí del arbusto al igual que Enola y Tewksbury se acercó a mi.
─Ya se fue. Estaba molesta.─Le miré.─Por favor no dudes de mi, Cicely vino por mi ayuda. Habló conmigo en el baile porque quiere cambiar las normas de las fábricas.─Aclaró y yo abrí los ojos sorprendida.
─¿Eso quiere hacer?─Preguntó Enola que salió entre los arbustos.
─Descubrió algo, creí entender que corrupción.
Oh, oh.
─Enola, ¿Piensas lo mismo que yo?
─¿Que Cicely es Sara?─Dijo en un susurro.
─¡Cicely es Sara!─Afirmé emocionada. No puede ser, había ignorado algo tan obvio.
"¿Admira a Lord Tewksbury. Creo que es un buen hombre y un gran reformista."
Miré a Enola y las dos salimos del edificio, el castaño los siguió aún confundido.
─Tewksbury...¿Qué significa ese mensaje que me enviaste con el abanico?─Pregunté, lo último que me faltaba para confirmar todo era esto.
─...Significa que te amo. ─Oh, por las barbas de Merlin. Sara también le envío un mensaje oculto a Sr Lyon.
Y el le sonrió.
─Trabajan juntos, enamorados.─Dijo Enola aún un poco desconcertada.
─Buscaban tu apoyo.─Tomé a Tewksbury de los hombros.─William he invitó al baile porque es un radical, ¡Igual que tú!
─Aleen, es mejor que regresemos. La policía aún te busca.─Dijo y me tomó de la mano.
─¡No! Hablaremos aquí mismo, Vizconde Tewksbury. Tu me amas y yo también te amo.─Dije sonriendo como niña pequeña. Había descubierto varias cosas en un mismo día, tal parece que esto de ser detective se me da bien.
─¿Tu me amas?─Balbuceó.
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Capitulo corto, para dejarlos con la intriga. Ya estamos a dos cap de terminar este libro y eso me hace querer llorar, fue mi primera historia, publicada en el 2022.
