EXTRA 1

731 140 21
                                    

Lionel ya lleva un semestre asintiendo a la universidad, Memo es quien generalmente lo lleva y lo trae de la escuela, pero no esta vez, así que le toco caminar solo a las 8 de la noche.

El entrenamiento terminó un poco tarde esta vez debido al partido próximo que tienen, el apenas está ganándose un lugar en el equipo así que tiene que demostrar todo lo que puede aportar, Memo, Andrés y Chucky también pertenecen al equipo, al principio le sorprendió que los entrenadores estuvieran tan felices cuando Memo ingreso a la universidad, pero Andrés le contó que en su época de preparatoria Guillermo era como una celebridad local ya que en aquellos años ganaron un torneo estatal gracias a la gran actuación de su novio.

Iba pensando si comprar tacos, un nito o hacerse cena en la casa, que no se dio cuanta de cuando una persona lo empezó a seguir. Memo se encargo de que se aprendiera todas las calles del barrio, ya tiene una ruta definida, pero decide cortar camino por una calle que no es muy larga pero si está oscura.

Tiene recuerdo de Vietnam cuando siente el tirón de la mochila, y escucha la frase que le heló la sangre alguna vez.

-Cámara carnal, ya te la sabes, como vas, mochila y celular.- Lionel sabe que conoce esa voz, intenta recordar.

-Muévete carnal que no tengo tu tiempo- siente que algo le presiona en la parte de sus costillas.

-Wey no seas así carnalito, yo soy de aquí- Intento la táctica de supervivencia que alguna vez Chicha le enseño.

-No te creo ni vergas, ese asentó no es de aquí, apúrate perro, si no quieres que te entierre la bala fria- Le volvió a presionar mas fuerte el objeto.

Tuvo que sacar su carta bajo la manga.
-Wey soy el morro del Memo- Dijo rezando para que si sea un amigo de su Novio, que es casi imposible que alguien no lo conozca, salir con Memo en el barrio es como pasear con un político, todos lo saludan.

-¿Lio?- preguntó su asaltante.

-Si cabron, soy yo- por fin se pudo relajar, tenía miedo de que le robaran porque justamente hoy cargaba su portátil que le entregó la universidad en la cual cargaba todos sus trabajos finales.

-No mames por que no me dijiste, desde que te cortaste el pelo te vez bien diferente, carnal- Lionel se volteo y pudo reconocer al hombre, le decían el tuercas, y ya habían jugado algunas retas de fútbol juntos.

-Tuercas, casi me sacas el alma, maldito gil de mierda- lo regaño.

-Oye carnal, no le vayas a decir al Memo que te quise dar baje, por que es capaz de darme la madriza de mi vida- No entiende porque todos le tienen miedo a Guillermo, Chicharito y Héctor siempre alegan que tuvieron suerte aquella vez que Memo los golpeó.

-No te preocupes, de mi boca no sale nada- aseguro Lionel.

-Gracias Lio, es más te acompaño a tu casa carnal, por si otro culero te desconoce, ya sabes como esta la inseguridad en este país.

Lionel ha aprendido que para sobrevivir en el barrio hay que actuar como el barrio, los amigos de Memo le han enseñado el lenguaje ñero por lo que ahora se siente parte de la comunidad, incluso termina comiendo tacos con la persona que lo quiso asaltar hace cinco minutos.

Que bizarra es la vida.

DE MI BARRIO A TU CORAZÓN.Où les histoires vivent. Découvrez maintenant