Cuando el dependiente de la tienda escuchó la discusión, inmediatamente se acercó. “Disculpa, ¿cómo puedo ayudarte?”
Pensó que eran amigos cuando vio a Tian Yuan y Feng Si entrar y acercarse a la mesa de invitados.
Inesperadamente, después de unas pocas palabras, los dos se pelearon con los invitados sentados.
Tian Yuan ni siquiera miró al dependiente de la tienda. Señaló a las personas que aún estaban sentadas en sus asientos y dijo: “Quiero sentarme en este asiento. ¡Que se vayan!"
El dependiente de la tienda quedó en una posición difícil. “Bueno… Señorita, si le gusta ese asiento, ¿por qué no lo arreglo para usted?”
Antes de que la dependienta pudiera terminar, escuchó a Tian Yuan decir aún más fuerte: “¡Me gusta este asiento!”
La expresión del dependiente cambió, pero no se negó.
El dependiente de la tienda hizo todo lo posible por mantener una sonrisa educada. “Señorita, estos dos invitados ya están comiendo aquí. Por favor, no moleste a los demás huéspedes”.
“Su comida no ha sido servida todavía. ¡Solo cambia los lugares!” Tian Yuan todavía dijo sin preocuparse.
El dependiente miró a los dos clientes sentados en sus asientos con expresión preocupada.
Wang Qi originalmente solo sintió que esta mujer estaba buscando problemas sin ningún motivo.
¡Ahora, finalmente sintió que esta mujer no solo era ridícula sino también irrazonable!
La expresión de Wang Qi se volvió fea. “¿Crees que esta es tu sala de estar? ¡Puedes permitir que quien quieras entre y salga!”
Tian Yuan resopló y dijo: “¡Déjame decirte, será mejor que seas cortés conmigo!”
Wang Qi levantó las cejas. “¿Por qué? ¿Me morderás si soy grosero contigo?"
Tian Yuan se quedó atónita por un momento antes de reaccionar de inmediato a la burla en las palabras de Wang Qi. “¡No creas que no me atreveré a hacerte nada solo porque eres la prima de Lin Yu!”
Wang Qi y Lin Yun, que estaba sentado frente a ella, se miraron y vieron una sonrisa en los ojos del otro.
Sin embargo, Wang Qi siguió siendo muy educado y no se burló de la otra parte en voz alta. Ella solo reprimió su risa y preguntó: “Entonces, ¿qué planeas hacerme?”
Tian Yuan parecía estar perplejo por la pregunta. Feng Si tiró de su manga con fuerza.
Feng Si lamentó haber seguido a Tian Yuan a la tienda de postres. Sabía que Tian Yuan había estado de mal humor durante los últimos dos días y quería provocar a todos los que veía.
¡Sin embargo, las dos personas frente a ella no parecían fáciles de intimidar por Tian Yuan!
Feng Si tiró de la manga de Tian Yuan, pero Tian Yuan sacudió su mano con desdén.
Feng Si puso los ojos en blanco y simplemente se quedó a un lado, ignorando a Tian Yuan y dejándola hacer lo que quisiera.
De hecho, Tian Yuan parecía querer pelear con alguien. Le dijo enojada a Wang Qi: “Mi primo tiene el 10% de las acciones en esta tienda de postres. ¡Te dejaré salir como accionista ahora!”
Cuando el dependiente de la tienda escuchó esto, no pudo evitar sorprenderse. Esta tienda de postres era parte de una cadena con al menos dos o tres mil tiendas en todo el mundo. ¡Había cientos de ellos en el país! Si alguien tenía el 10% de las acciones de la tienda, ¡tenía derecho a hablar!
Wang Qi no se sorprendió por las palabras de Tian Yuan.
Ella sonrió y dijo: “¡Pensé que tenías las acciones! Tu primo podría tener derecho a ahuyentar a sus invitados, ¡pero no creo que tú lo hagas!"
La expresión de Tian Yuan se volvió aún más sombría. “¡Soy muy cercano a mi primo! ¡Mientras lo llame, puede hacerlo con una palabra!”
Wang Qi asintió en silencio y extendió su mano. “¡Por favor!”
“¿Eh?” Tian Yuan no entendió lo que quería decir Wang Qi.
“¡Por favor llame a su primo que posee el 10% de las acciones de esta tienda ahora y pídale que me ordene que me vaya!” Wang Qi explicó cuidadosamente sus intenciones a Tian Yuan.
Tian Yuan se puso furiosa al instante y su rostro se puso rojo.
El dependiente de la tienda también se sintió un poco incómodo. Quería interrumpir, pero no sabía qué decir.
Un mesero que acababa de traer bebidas y postres de la cocina se acercó. Claramente no sabía lo que había sucedido. Se quedó clavado en el suelo y miró la situación frente a él, sintiéndose un poco impotente.
Lin Yun notó la reacción del mesero y lo saludó con la mano, indicándole que trajera las cosas.
El mesero colocó las cosas sobre la mesa e inmediatamente se giró para escapar.
Lin Yun tomó la bebida frente a ella y se preparó para beberla mientras observaba la conmoción.
Inesperadamente, Tian Yuan agitó la mano y tiró la bebida al suelo frente a Lin Yun.
Lin Yun frunció el ceño y miró a Tian Yuan.
En este momento, Zheng Yu y Lin Yu entraron.
“¿Qué pasó?” Zheng Yu preguntó primero.
Aunque Lin Yu no quería participar en estos asuntos diversos, solo podía prepararse y preguntar: “Prima, hermana, Tian Yuan, ¿por qué estás discutiendo?”
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°Erinnee°
