Miedo a Amar [TERMINADA]

Conversaciones II

El viaje se me hace más largo de lo habitual. He pospuesto esta "reunión" demasiado tiempo.

no fui para su cumpleaños, ni para el aniversario de su muerte y me siento terrible por eso, pero mis días no han sido fáciles y si a eso le sumamos que cada día me siento más culpable de que no estés acá, que no pudieras seguir con tu vida, cumplir tus sueños.

La culpa me consume, mucho más que los rumores.

Intento seguir adelante, pero cada día es más difícil, me siento horrible por ser yo quien puede seguir con su vida y no tu. Por culpa mía tú ya no puedes seguir con tu vida.

Me gustaría poder tomar tu lugar. Me gustaría que aun estuvieras a mi lado y que pudiéramos hablar de todo y nada, como antes.

Sigo conduciendo e intenté despejar mi mente concentrándome en las cosas que hay por el camino, pero no puedo, mi mente es bombardeada constantemente con muchas preguntas y pensamientos de culpa.

Llegó al cementerio y estaciono el auto, lo dejo en un lugar cercano, para no tener que caminar tanto.

Camino en dirección a la tumba de mi mejor amiga, si hace un poco más de dos años me hubieran dicho que iba a caminar en dirección a la tumba de mi mejor amiga, con flores y mi guitarra, no lo hubiera creído y les habría dicho que vayan a un psiquiatra.

Hace dos años que venir a qui se volvió parte de mi vida, pero aun asi por mucho que venga, creo que nunca voy a acostumbrarme a la sensación de soledad y tristeza que me genera estar acá.

Cuando llegó a la tumba de Amalia dejó las flores en una especie de maceta que hay junto a la lápida y tomó asiento frente a la misma, estar asi me transporta a cuando nos sentábamos en mi cama y hablábamos sobre las personas que nos parecían bonitas, criticamos las películas nuevas y las series, mientras comíamos dulces o papas.

Siento como mis ojos se cristalizan e intentó tomar aire para no empezar a llorar.

Tomo un poco de aire antes de empezar a hablar.

—Hola ¿Cómo estás? Lamento no haber venido antes, no la estaba pasando bien, de hecho, no la estoy pasando bien. Las agresiones en nuestro instituto aumentaron, bastante, incluso llegué a recibir algunos golpes, no te imaginas las excusas que tuve que inventar con mis padres, creo que incluso pensaron que me estaba volviendo una persona conflictiva. — Al decir eso último me río y continuo. — las cosas se me complicaron mucho, las agresiones eran cada vez peores, dios, llegue a incluso a llevar una camisa de cambio, intentar faltar y muchas más cosas. Sentía que ya no podía más con eso, es muy difícil soportar por tanto tiempo, en especial porque siento que me lo merezco. Aun así, la situación me sobrepasaba y decidí que lo mejor sería cambiar de instituto, fue algo complicado, no quería que mis padres se enteraran de las agresiones y tuve que inventar muchas cosas para que accediera. — Siento como algunas lágrimas caen por mis mejillas, las limpio y tomó aire.

Miro a mi alrededor para asegurarme que no hay nadie que pueda escucharme, me da mucha pena que alguna persona me pueda escuchar y crea que estoy loco.

—El nuevo instituto, es muy lindo, te hubiera gustado mucho, tienen un gran equipo de natación y varios equipos con enfoques artísticos, me gustaría que pudieras verlo.

La directora me puso un tutor, para que me ayude a ponerme al día, pero es algo despistado, aunque no voy a negar que es muy inteligente, también es bastante bonito, me gustan mucho sus ojos, aunque su pelo también es increíble, está todo lleno de rizos alborotados, su piel está llena de pecas, a veces me gusta mirarlas, parecen estrellas en una galaxia, su sonrisa es hermosa, adoro ver como sonríe, cuando lo hace se le forman dos pequeños hoyuelos.