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Maratón 5/5

Yoongi caminaba hacia la propiedad que el director le había dejado para que ultilizaran cómo oficina para sus fechorías, se adentro a esta y comenzo a buscar el pasaporte de Hoseok, dando con este entre los papales desordenados que estaba en la me...

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Yoongi caminaba hacia la propiedad que el director le había dejado para que ultilizaran cómo oficina para sus fechorías, se adentro a esta y comenzo a buscar el pasaporte de Hoseok, dando con este entre los papales desordenados que estaba en la mesa de la oficina.

Soltó un suspiro aliviado al ver el pasaporte ahí, lo tomo entre su mano izquierda y se encaminó a sentarse para poder abrir la laptop y proceder a teclear en ella, estaba haciendo trabajo cuando la puerta de la oficina sonó, ChangBin uno de los reclusos, asomo su cabeza y le miro.

— Jefe, quería decirle algo...— el joven le había murmurado lentamente.

Yoongi no dudo en asentir haciéndole una venía para que entrará completamente a la oficina, ChangBin entro casi dudoso y con algo de temblor en sus manos, ChangBin era un chico bajito y con músculos por todos lados, Yoongi poso sus ojos gatunos en él.

— Quería decirle que con los del equipo de boxeo...p-pensabamos no sé..digo .hacer un t-torneo.— Tartamudeo ChangBin.

Yoongi sinceramente no le interesaba esas clases de cosas, pero sabía que a JungKook si, no muy convencido decidió asentir, sin darle importancia.

— Eso es todo.— Yoongi había dicho en un casi balbuceo.

Diablos, su voz hizo que ChangBin se sintiera nervioso y sonrojado, así que no dudo en asentir y casi corriendo irse de la oficina.

Yoongi procedió a teclear en la laptop, el sonido de las teclas era mi único que se oía, no habían pasado ni tres minutos cuando la puerta fue abierta sin tocar, por ella apareció un buen dotado JungKook, el tipo era alto, con músculos y tatuajes, su cabello largo y negro resplandecía, Yoongi lo miro de pies a cabeza notando que traía el uniforme salmón en la parte de arriba quitado y las mangas largas amarradas a su cintura, mientras una camisilla sin mangas estaba en su pecho fornido.

—¡ Hyung!— exclamó el recién llegado mientras procedia a sentarse en la silla de enfrente de él, Yoongi volvio su mirada a la laptop y Kook noto que le ignoraba.

— Hyung!— el chico grito mientras estiraba su mano sobre el escritorio y agarraba la mano de Min, que cuando sintió el contacto apartó la mirada de la laptop y la posó sobre la mano de Kook que estaba en su muñeca.

— ¿Dime algodón?— Para nadie era un secreto, Jeon no solo tenía un apodo único establecido por Min, sino que Kook era tratado con cariño por el jefe.

— Enserio aceptaste la propuesta de ChangBin.— Pronunció con deje de alegría el chico.

Yoongi tomo la mano de Kook que aún estaba en su muñeca y la aparto de su muñeca con poca fuerza.

—Lo hice— asintió el de piel blanquecina mientras alzaba su mano y con su dedo índice señalaba al de cabello largo —se que te gustan todos los deportes pero más boxear.

ᴘʀᴇsɪᴅɪᴀʀɪᴏs// 𝔜𝔬𝔬𝔫𝔐𝔦𝔫  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora