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Reese Weasley.
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Abrí mis ojos con emoción una vez pude admirar con fascinación el paisaje frente a mí. Luna a mi lado soltó un chillido, dejando caer su chaqueta y corriendo hacia el sitio. Theo, por otro lado, recorrió las pertenencias y sonrió levemente.

-. ¡Esto es increíble! ¡Y bellísimo!

Asentí, admirando la cascada que acabábamos de encontrar en las fronteras de la reserva. No queríamos ingresar demasiado a La Push, pues aunque aquel chico se había disculpado, Theo tenía razón; Había algo con respecto a ellos que me tenía dudando.

Por lo que, decida a mostrarle los lobos y la flora del sitio a Luna, los guié a una zona cercana a la de la última vez, ahora encontrando un río con una hermosa cascada cerca.

-. ¡Es un poco de ajenjo!.- Alzó su voz Luna, levantando algunas hojas entre sus manos.- podrás preparar pociones, cariño.

-. ¿Por qué hay tantas plantas de pociones en la zona?.- Frunció el ceño Nott. Me encogí de hombros, mientras acomodaba un mantel en el suelo y dejaba la canasta sobre este.

-. Ni idea. Pero mientras no encontremos plantas venenosas, o un Alihotsy, no me preocuparía demasiado.

Luna se acercó encantada, abriendo su pequeño bolso de herbología, ubicando cada una de las hojas que había sacado del ajenjo en su sitio correspondiente. Sonreí enternecida al verla con aquella sonrisa.

-. ¿Podemos probar el agua luego de comer? Quiero ver si hay hadas marinas en las profundidades.

-. Cariño, no creo que encuentres aquí. No hay nada de magia en estas tierras, ni siquiera algo fuera de lo mundano de los muggles.

Esta vez coincidí con Theo, pero prometí acompañar a Luna igualmente, al menos hasta que apareciera algún lobo por comida.

Theo y yo nos procuramos de servir la comida en pequeños platos que habíamos traído. También dejé a la vista un poco de cerveza de mantequilla que había preparado anoche, junto a una jarra con jugo de fresa; el favorito de Luna.

-. ¿Cuando volverá Hermes?.- Preguntó Theo, con su ceño fruncido.

-. Debería estar de vuelta mañana, y con él las varitas que le pedí a los gemelos.- Ambos asintieron.- Ansío tener algo de información por parte de los chicos.

-. Todo está bien, Reese. De seguro solo serán cartas hablando de Ron siendo Auror, y lo molesto que es para todos que presuma de ser auror.

Solté una carcajada ante la mención de mi primo, y lo cierto que aquello sería. El pelirrojo no era conocido por ser alguien demasiado modesto con sus logros, sobre todo ahora lurgo de la guerra, convirtiéndose en alguien famoso en el mundo mágico.

-. ¡Oh, lo había olvidado!.- Luna urgó en su bolso, hasta sacar una pila de papeles arrugados.- Hermione me ha estado mandando algunos ejemplares del profeta para que no estemos desinformados.

Nos tendió dos ejemplares, los cuales parecían ser de hace unos días atrás. Me tranquilizó saber que la castaña se había preocupado en mantenernos actualizados con respecto a todo.

Sostuve uno entre mis manos, detallando el titular y las fotos móviles que se veían.

Harry Potter: El auror más joven de los últimos años ha encontrado un escondite de mortífagos.

"... Se cree que este escondite pertenecería a la familia Carrow, y que habría sido utilizado recientemente como refugio para los buscados seguidores de Lord Voldemort."

Fascinated¹ | JACOB BLACKWhere stories live. Discover now