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una semana había pasado.

una maldita semana.

días silenciosos, sólo haciendo ruido en su cabeza. cigarrillo tras cigarrillo, café, frustración... arrepentimiento.

harry ya se había sentido vacío toda la vida, hasta el punto de acostumbrarse a aquello... pero ahora, ese vacío lo inquietaba, lo llamaba, y ya no podía ignorarlo.

así que hubo un día, en el que harry finalmente lo entendió, cuando realmente se tiró a la silla de su escritorio, soltando un pesado respiro; él se había dado por vencido de intentar, día tras día, de concentrarse en su puto trabajo.

él no pudo.

no pudo contra ese sentimiento reprimido, contra un louis que ya no le miraba ni mucho menos se acercaba a él con esa dulzura...

y le quemó por dentro, porque eso sólo le hacía pensar en él, con lágrimas en sus preciosos ojos, sintiéndose solo, tan solo como él... y le importaba. mierda, le importaba tanto, quizás le dolía más a él que a louis haberle hecho daño.

él lo supo, en ese preciso momento; estaba jodido. ¿por qué? porque sentía la agonía de no tenerlo con él, de simplemente no sentirlo a su lado, ¿pero cómo? si jamás había tenido la oportunidad de tener la cercanía de su cuerpo, entonces, ¿qué era?, ¿qué era eso que le llamaba a gritos, que reclamaba su maldito interior?

harry ni siquiera podría dejar salir esa verdad entre sus labios.

-debo irme.

zayn sube la mirada hacia su hermano, harry, cuando lo escucha, y frunce el ceño, con un cigarrillo entre sus dedos, sintiéndose extrañado, porque harry jamás dejaría el trabajo, nunca interrumpiría una reunión con la familia... como lo acababa de hacer ahora.

-¿estás bien? -pregunta liam, y se preocupa, porque nada significa lo mismo si harry no está presente.

quizás liam era el hermano mayor de los tres, pero no resultó ser él quien manejaba la familia (lo cual no le molestaba en absoluto) ni mucho menos era zayn, el menor. era harry, el hermano de al medio, quien obtuvo el cargo con simpleza, mediante los años pasaban y ellos crecían, porque el ojiverde había nacido con esa personalidad y actitud más peculiar de los hermanos; lider y protector de la familia. la suficiente inteligencia para no confiar en cualquiera y saber trabajar con estrategia y detalle... silencioso como una pantera.

-si, es sólo... -harry guarda silencio por un momento, sin encontrar las palabras adecuadas- tengo un problema que solucionar.

-louis -es lo que zayn menciona, haciendo que harry lleve la mirada hacia el morocho. él sólo eleva las cejas, dándole una calada más a su cigarrillo.

-¿aún no arreglan las cosas? -liam pone una mano en su hombro, entonces harry lo mira, frunciendo el ceño- lo siento, esa mirada de perro que louis tiene simplemente lo revela todo.

-chicos, basta -salvatore quita la mirada de los papeles, ahora hacia sus hijos- no se metan en sus asuntos.

-está bien, papá, déjalos -harry responde tranquilamente y apenas sonríe, zayn y liam ríen levemente, volviendo a su trabajo, cuando el ojiverde se para del asiento, dejando el cigarrillo en el cenicero- ya vuelvo.

-no lo creo -zayn dice, observando sus papeles- nos vemos en la cena, hermano.

harry le revuelve el cabello a zayn y el morocho ríe, luego caminando hacia la puerta, hasta salir del despacho.

sólo louis está en su mente.

él sabe que no es bueno expresando sus sentimientos, pero más le importaba dar el primer paso hacia louis... honestamente, no se sentía capaz de seguir soportando el estar alejado de él, así que abre la puerta de su habitación sin pensarlo dos veces más, y sus ojos observan todo su alrededor al entrar.

andragathia - larryWhere stories live. Discover now