¿Un regalo de San Valentín? [MITAKE]

Capítulo 5.

"Los dorayakis no parecen ser mala opción (Mikey-kun esta furioso por ser ignorado)"

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 Faltaba unas horas para que fuera el día tan deseado para todos los enamorados, muchos realizaban o envolvían sus obsequios. Pero nuestro segundo principal se encontraba furioso y sumergido en sus pensamientos.

Tanto que en la reunión que habían programado para ese día se encontraba desprendiendo una extraña aura de obscuridad la cual hacia que ninguno de sus subordinados se le quisieran acercar, causando una extremada molestia en los capitanes sobre todo en Draken que se encontraba arto de la actitud de su amigo.

—Oye Mikey—Habló irritado Draken pero fue abruptamente ignorado por su líder, haciendo que se le notara la vena a Ken por la exasperación, Mikey presto atención a su amigo hasta que este toco su hombro haciendo que todo tipo de pensamiento desapareciera trayéndolo de nuevo a la realidad— ¿Qué putas te sucede? Haz estado de un humor del demonio toda la junta, incluso todos huyeron por tu estúpida actitud

—¡Es que Kenchin! ¡Takemicchy me ha estado ignorando durante tres dias! ¡Incluso en las reuniones, se va corriendo cada vez que me quiero acercar y ahora ni siquiera vino! — Contesto irritado el rubio mientras formaba un tierno puchero, que para Draken fue de un niño berrinchudo— ¡Llevo tiempo sin estar cerca de él siento que moriré!

— Tal vez este ocupado o simplemente se cansó que lo estés hostigando demasiado Mikey— Regaño el más alto debido a que siempre que el teñido venía Mikey nunca se separaba de él. Aunque Draken conocía la verdadera razón por la que el menor no había ido a la reunión, pero simplemente quería molestar a su amigo, tal vez así dejaría de ser un posesivo de mierda.

Los comportamientos de Manjiro dejaban mucho que desear para ser el líder de la poderosa pandilla Tokyo Manji la cual gobernaba todo Shibuya, aunque a primera vista su comportamiento y actitud llegaba ser inaceptable para ser él invencible Mikey, ya que era muy difícil hacer que Manjiro terminara sus deberes. La mayor parte del tiempo los hacia Ken debido a esto no se negó cuando Takemicchi le pidió permiso para faltar a la reunión y le suplico que no le dijera por qué a Mikey y que impidiera a toda costa que intentara visitarlo.

Era como su pequeña y cruel venganza para el bastardo.

— Takemichi nunca se aburrirá de mi... no puede...— Murmuro mientras hacía un puchero.

— Por lo que fuera ahora tienes tiempo de hacer tu tarea y para pensar que te pondrás para el festival— Sentencio Draken

— No quiero hacer tarea y no podré ir... El abuelo me pidió que le ayudara en algo — fue lo único que dijo para después irse sin dejar de hacer su puchero o de desprender su aura deprimente.

— Maldito enano espero y Takemicchi se enoje contigo— Refunfuño Draken, al saber que Hanagaki se pondría triste si ese tipo no iba al festival.

Despues de esa potente rabieta que hizo el líder de la Toman por no poder ver a su enamorado. Por qué Mikey ha estado enamorado de Hanagaki Takemichi desde que lo vio aquel día lleno de moretones, siendo apaleado por Kiyomaza.

Pero lo que lo enamoro fue su gran determinación y el hecho de que a pesar de estar completamente golpeado siguió levantándose, decidido a no dejar que aquel bastardo tuviera la honra de obtener esa victoria. No solo eso, lo que lo enamoró aún más fue el momento en el que miro fijamente aquella mirada azulada que le hacía derretirse. Su mirada 'pura y angelical hicieron que deseara que quisiera tenerlo para él solo, sin permitirle irse de su lado.

Mikey quería cuidar a Takemichi como la cosa más preciada de su vida, era por eso que el hecho de que lo estuviera evitando lo dañaba fuertemente y aquello también hizo que se fuera furioso a su casa, pero no se preocupaba tanto porque pronto pediría explicaciones.

Aunque Manjiro sí que era un completo estúpido porque en ningún momento se había dado cuenta de que mañana seria San Valentín y que su querido Takemichi pudo haber estado preparando algo para él, pero no puede evitarlo cuando se trataba de Hanagaki se convertía en un pequeño cachorro mimado.

Mientras el Sano iba molesto a su casa, Takemichi se encontraba contento por que Yuzuha estaba en su casa brindándole su preciada ayuda, en ese momento deseaba besarla y abrazarla simplemente para demostrarle su agradecimiento.

—Waaahh ¡Se ven muy bien Yuzuha! — Exclamo Takemicchi emocionado mientras veía los pequeños dorayakis en el plato.

Despues de muchas horas de esfuerzo por fin le habían quedado bien estos no se veían tan deformes como los anteriores por lo que se podía considerar un rotundo éxito. Hanagaki lloraba de la felicidad en verdad creía que todo se había ido al carajo.

— Si se ven bastante bien e igual saben genial — Felicito la castaña clara mientras comía un dorayaki— Hiciste un gran trabajo Take.

— Todo fue debido a tu ayuda... Enserio gracias, ahora tan solo espero que a Mikey-kun le guste —

— Estoy segura que le fascinara y si no es así yo misma lo golpeare—Le sonrió mientras se tronaba los huesos de su mano, cuando la Shiba quería realmente podía dar algo de miedo— Bueno me tengo que ir nos vemos mañana en el festival.

Despues de una despedida animada en donde la mayor le deseo suerte a su amigo esperando que realmente fuera correspondido. Takemichi ingreso a su departamento y se puso a escribir pequeñas notas las cuales pegaría en las bolsitas donde metería los dorayakis. En realidad, esperaba que fueran del agrado de Manjiro.

Al terminar su trabajo; lo que le llevo otra hora, guardo los dorayakis en una bolsa de regalo; ahí es donde se lo entregaría al de ojos obscuros. Puede que no fuera mucho pero realmente estaba plasmando su amor en aquel obsequio y quería que a Mikey también le gustara.

Suspiro al ver que por fin había terminado ahora tan solo quedaba esperar para mañana, ya que se lo entregaría en el festival.

Su plan era perfecto...

Despues de reunirse con sus amigos y de pasar un rato con ellos, justo cuando quedara poco tiempo para que lanzaran los fuegos artificiales, haría su movida cliché.

Lo llevaría donde se pudieran ver mejor y le entregaría el regalo, al igual que le diría finalmente sus sentimientos y esperaría que lo peor o lo mejor de su vida sucediera.

Estaba nervioso, mañana seria el gran día por lo que con todas sus inseguridades y aquellas pizcas de felicidad se acostó en su cama para esperar al gran día.

¡Animo Takemichi tu futuro dependerá de lo que suceda mañana!

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