𝕺𝖓𝖊 𝖘𝖍𝖔𝖙𝖘 | 𝕾𝖙𝖊𝖛𝖊 𝕳𝖆𝖗𝖗𝖎𝖓𝖌𝖙𝖔𝖓

ⓡⓔⓒⓚⓛⓔⓔⓢ

Steve tenía sus brazos alrededor de tu cuerpo dando caricias en tu pecho, haciendo caminos con sus dedos uniendo cada uno de los lunares que lo adornaban, siempre decía que hacer eso lo relajaba y solo para sentir la suavidad de tu piel.

El sonido de la radio armonizada la habitación pero tu sonido favorito eran los latidos de su corazón, tranquilo.

Después de tanto tiempo era agradable tener un tiempo a solas, relajante y sin preocupaciones de criaturas extrañas o hacer de niñeras 24/7.

ー Detesto hacer esto pero debo irme, le prometí a Dustin que lo iría a ayudar a... no recuerdo bien pero tengo que irme ー te quejaste sintiendo como se alejaba y se ponía de pie apagando la radio ー Lo sé, también quiero asesinar a ese pequeñín.

Se despidió dejándote acostada, triste, pero alguien tocando la puerta te despertó y ese alguien era Dustin.

ー ¿Qué haces aquí? ー preguntaste al abrir la puerta.

ー Buscando a Steve, debe estar aquí es la hora en la que siempre están juntos.

Confundida lo miraste para después ver el reloj que estaba justo aún lado de la puerta, tenía una hora que se había ido.

ー No, el día de hoy no vino. Lo siento, pero puedes llamarle si quieres, pasa.

Lo dejaste pasar para acompañarlo al teléfono fijo, tal vez se encuentra en su casa, ya lo averiguaría. Dustin molesto marco el número esperando a que contestará.

¿Dónde demonios estás?

...

¿En casa de T/n?

...

Ok, dile hola de mi parte

Y colgó.

Te miro con lastima y solo te pudiste quedar parada viendo el teléfono aún en shock, ¿cómo era posible que estuviera pasando eso?

ー No importa Dus, no importa.

ー Pero... claro que importa, está mintiendo, no se tu pero yo no me quedaré aquí, iré a ver qué es lo que está pasando.

ー Dustin, esto no es un maldito caso de investigación, es mi relación así que yo sabré que hacer, por lo que te prohíbo que lo vayas a ver.

ー Pero...

ー  Pero nada Dustin, ¿puedes irte? por favor

Dustin salio de tu casa lentamente sin querer dejarte sola pero al cerrar la puerta las lágrimas salieron sin piedad, el dolor en el pecho fue gracias a la traición que estabas sintiendo en ese momento, tu mente intentaba encontrar una razón de ese comportamiento.

Tal vez estaba preparando una sorpresa o algo por el estilo, pero la curiosidad te ganaba así que con tu abrigo en mano y las llaves de casa tomaste la bicicleta de tu hermano y fuiste hasta la casa de Steve.

Las lágrimas nublaban tu vista pero no fueron impedimento para llegar hasta la puerta de su casa. Sabías que si estaba con alguien no abriría, el auto de sus padres no estaba pero el suyo si, así que estaba solo él. Fuiste hasta la zona de la alberca que daba a la ventana de su habitación para ver si lograbas ver algo y si, las luces estaban encendidas pero no habia ningún movimiento, hasta que una risa de mujer erizó todo tu cuerpo.

ー Steve... me haces cosquillas ー entre risas se escucharon gritos.

La voz la conocías perfectamente, era aquella animadora que tanto queria llamar la atención de Steve, que siempre quería estar junto a él y que para Steve ella no era nadie... 

O tal vez sí.

Las risas se detuvieron y viste desde tu lugar como bajaba las escaleras corriendo, así que aprovechaste para esconderte detras de los arbustos que rodeaban la casa viendo como ella salía hacia la alberca con su traje de baño siendo acompañada por Steve quien la abrazaba de la cintura.

ー ¿Seguro de que tu novia no vendrá o ese pequeño de actitud extraña que siempre parece que quiere llorar?

ー Si, ella cree que estoy con él y él cree que estoy con ella así que no hay problema.

Y como si las cosas no pudieran ir peor, la beso, frente a ti, de una manera que ni a ti te besaba.

Con el dolor aumentando lentamente te fuiste de ahí, ya habías visto suficiente.