013

1.2K 139 160
                                    


Los reclamos de Taehyun al otro lado de la línea, en vez de afectarle como creyó, lograron estresarlo e irritarlo.

Porque sí, había decidido terminar todo con Taehyun; cortar lazos por completo.

Y así lo había hecho.

Al momento de colgar, sintió una inexplicable paz. Debió haber hecho eso hace mucho tiempo atrás.

Maldita sea, solo tenía que ser honesto consigo mismo, no era tan difícil.

Ahora solo faltaba solucionar el otro problema: Minho.

Tenía que solucionar las cosas con él a como de lugar, por lo menos lograr que no lo ignorara. Jisung necesitaba una reacción de su parte, cualquiera, por más pequeña que fuera; mirarlo de reojo, hablarle o responderle por lo menos con un maldito monosílabo.

Aquella noche, él se dio cuenta de que Minho aún lo quería, aún lo amaba. No era como todas la basura que salía de sus bonitos labios, a él no le daba igual, a él le dolía que estuviera con alguien más, él no era indiferente, no podía serlo...

Dicen que a veces necesitamos un buen golpe para reaccionar.

Esa noche que lo escuchó llorar por su culpa, en la oscuridad, buscando protección de él en alguien más...

Ese fue su golpe, y joder como le había dolido.

Jisung había sido un gran idiota, de verdad. Él había sido el causante principal de su separación; quien empezó a ser frío, distante, a generar discusión por todo, a dejarlo de lado.

Todo en tan solo unos pocos meses.

Siete meses superaban nueve largos años, increíble.

Recordarlo era incluso doloroso.

--Bebé, ¿tampoco vas a venir a almorzar hoy?

--Iré para la cena, amor. Tengo mucho trabajo ahora.

--Entiendo, yo también, nos vemos más tarde supongo. Te amo, ¿sí?

--Te amo mucho.

Parecía un sueño lejano...

--¿Cariño? ¿Aún no has llegado a casa?

--No bebé, sigo trabajando.

--Ayer llegaste tarde. No estás descansando bien.

--Estoy bien, volveré más temprano hoy.

--Te amo.

--Yo a ti.

Jisung no supo cuando su cariñosa preocupación se empezó a volver irritante para él.

--Mi amor, ¿por qué has estado desviando mis llamadas? ¿No vendrás a almorzar de nuevo?

--No Minnie, ya te dije mil veces que estoy en conferencias esta semana. No iré a almorzar hasta el sábado.

--Oh... Entiendo... Solo... Cuídate, ¿sí?

--Claro, nos vemos.

De decepción en su voz...

--Supongo que de nuevo no vendrás ni a cenar.

--Estoy trabajando, lo sabes, cielo.

--Lo sé. L-Lo siento...

--Te llamo luego.

A indiferencia, desinterés...

--¿Minho? No podré ir tampoco hoy. Creo que iré al viaje de trabajo que te comenté.

--Bueno.

--No te olvides de depositarme lo que te dije.

--Claro.

stuck with u © HanknowWhere stories live. Discover now