WITH ME || Manjiro Sano

capítulo 14

La noche finalmente llegó, rápidamente me dirigí hacia la sede de Tenjiku con un solo objetivo.

Voy hablar con Izana.

Me sentí muy incómoda en la fiesta, tuve que contener las ganas de apartarme y gritarle en la cara. Eso es lo que me gano por ser amable con las personas que apenas estoy conociendo.

Traté de ser lo más amable y divertida frente a todos para ganarme su cariño, pero creo que eso solo hizo que me tomaran de ingenua.

A partir de ahora dejaré de bromear por todo y tomaré las cosas con más seriedad.

Solo tengo que tener en claro que no me llevaré bien con todos y eso no es malo. Nadie es capaz de llevarse bien con todo aquel que conozca.

Al entrar en la sede de Tenjiku los gritos de los espectadores hicieron eco en mis oídos. Al centro estaban peleando dos hombres enormes. No le tomé importancia y busqué con la mirada al líder.

Izana estaba sentado junto a Kakucho, ambos observando la pelea desde un lugar despejado. Los Haitani también estaban observando la pelea con aburriendo.

Ran noto mi presencia y me saludó levantando la mano levemente con una sonrisa divertida.

Le devolví el saludo sin ganas de sonreír, hoy no puedo hablar con él, tengo que ir por el peliblanco.

— ¡Izana!

Al escuchar mi grito el peliblanco sonrió levemente. Le indiqué con la cabeza que me siguiera, me dirigí a la salida cuando Izana se puso de pie.

Ya afuera de todo ese alboroto esperé al peliblanco hasta que finalmente estuvo frente a mí.

— Pensé que hoy no tendrías ganas de venir así que no te fuí a recoger — dice con una sonrisa tranquila.

Podía ver leves moretones en su rostro, ahora sabía quién era el que más resultó herido.

— Ya me cansé de tí... Pensé que tal vez esto era el comienzo de una buena amistad pero me doy cuenta que tú solo quieres usarme.

— Vaya... Pero sí somos amigos — afirmó totalmente seguro de sus palabras — al menos por mi parte sí...

— Por mi parte no, en definitiva no quiero vincularme más contigo — le dije frunciendo el ceño — gracias a qué me llevaste al cumpleaños de Shinishiro me dí cuenta que tú no eres ni nunca llegarás a ser mi amigo.

— Si, la verdad... Lamento haberte incomodado — dice algo avergonzado — ¿Fue demaciado haberte tocado?

— Incluso si solo hubiera sido mi mano no tienes el derecho de tocarme cuando se te antoje, no eres nada mío.

— Lo sé, me pasé.

— Fue muy humillante que todos me estuvieran viendo mientras me tratabas como un juguete...

Claro que fue muy humillante, podía sentir la mirada de los amigos de Shinishiro y los de Manjiro fijamente en mí.

¿Ahora que estarán pensando de mí?

— No eres un juguete, yo no tengo nada contra tí... — Murmuró tratando de tocar mi mejilla, rápidamente me hice para atrás.

Lo está haciendo otra vez.

— Dime, ¿Que es lo que te impide dejarme en paz?

— Nada, solamente no quería que te vayas de mi lado.

— ¿Eh?

— Lo digo encerio.

— ¿Que estás...?