Saga de Tanya la Zarina

Capítulo 4

Capítulo 4

Pov Tanya

Sentí que el viento me hacía sentir más vivo mientras caminaba por el hermoso parque del Palacio de Kieva, Viktor había sido muy amable conmigo esta semana y me llevó de viaje a muchos lugares diferentes, el hermoso río Dniéper, un par de museos ilegales en Kieva que el zar no se atrevió a forzar una prohibición y un evento conmemorativo de los héroes de Kieva, tan agradables como habían sido estos programas, eran políticos, el simbolismo de un Romanov en tal evento era principalmente esperanzador para la gente normal.

"Princesa", volviéndome vi a una sirvienta, "Al heredero del Ducado de Kieva le gustaría verte", asintiendo levemente le indiqué que liderara el camino.

El Ducado de Kieva era seguramente el mejor territorio de toda Rusia, la tierra más fértil, el mejor terreno para la infraestructura y una cantidad significativa de minas. Por otro lado esto tenía sus problemas, el primero de ellos era que era la frontera directa con el Imperio, lo que la convertía en la zona más devastada en caso de guerra, por otro lado era uno de los territorios más independentistas de Rusia y por último, pero no menos importante, abundaban los anarquistas, son una ideología que solo funcionó activamente una vez en la historia, y fue en Kieva, menos de 1 año, pero lo hicieron, no deben ser subestimados solo porque son idiotas.

Siguiendo detrás de la criada finalmente llegué a mi destino.

"Hola Tatiana, ¿cómo estás, estás disfrutando de tu estancia?" Dijo mientras ella se levantaba de su silla.

"Sí, definitivamente, Kieva es un lugar hermoso, incluso diría que mejor que Moskova, pero no se lo digas a mi padre", dije riendo.

"Definitivamente, no quiero que el zar nos invada nuevamente por envidia".

Riéndose de nuestro pequeño intercambio de cortesías, me ayudó a sentarme en la silla y luego se sentó.

"¿Quieres café?" Sentí que mis ojos se iluminaban DULCE BEBIDA DE LOS DIOSES.

"¿Estás seguro de que está bien?" Viktor hizo una señal con la mano de que no importaba, asintiendo con la cabeza más fuerte de lo que me gustaría admitir que vi como Viktor pidió café para mí y para él.

"¿De qué querías hablar?" Le pregunté, recordando que él fue quien me llamó.

Viktor guardó silencio por un segundo y luego me respondió. "Hace algún tiempo, el zar le dio permiso a mi padre para aumentar el ejército en Kieva, si mal no recuerdo hace 5 años, van a tener una marcha militar en 3 días, con las nuevas armas que le pedí a mi padre que financiara, quería preguntarte si querías venir a ver el desfile militar".

Aunque Viktor es un hombre inteligente para su edad, todavía es un niño, creer que un padre lo escucharía en temas tan importantes como las armas que usará el ejército, aunque bueno, me pidió que intentara legalizar el idioma nativo de Kieva, ¿tal vez consiguió que su padre lo escuchara y por lo tanto espera el mismo resultado? Le envié a mi padre una carta de más de 30 páginas describiendo la situación y los beneficios, tardé 2 días en terminarla y me dolían mucho las manos, tuve que pedir ayuda para escribir la carta en un momento, pero al final la terminé y la envié, había hecho todo lo que podía, cuando mi padre me rechace, tendré que encontrar otra manera de mejorar mi relación con Kieva.

"Estaría encantado de asistir al desfile militar con ustedes y ver las nuevas armas que ayudaron a desarrollar".

Seguramente serían hermosos rifles o algo así, sin embargo, tendría que elogiarlos de todos modos para mejorar las relaciones.

Estaba a punto de responderme cuando vi llegar a las sirvientas con las tazas de café, sin embargo, sentí que mi corazón se caía al suelo mientras ponían leche y azúcar en el café, Viktor pareció notar de inmediato mi decepción.