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Miro ambos lado de la calle, decidió salir de su escondite y caminar con calma. Eso de esconderse de alguien era difícil teniendo en cuenta quien era esa persona.

Y esa persona... no iba a rendirse hasta poder hablar con ella.

Boruto Uzumaki.

El chico que estuvo evitando desde que llego de su última misión en la Aldea de la Niebla.
Sabía todo lo que había pasado en esa misión, muchas muertes y casi se planeaba una guerra.

Y... que Boruto se había sacrificado ese día para detener la guerra.

No sabia que hacer en esas situaciones. Los libros no tenían ese tipo de problemas para saberlo. Decidió dejarlo para que descanse y todo se calme.

Pero su voz venir detrás de la puerta a cada hora la asustada, ella debía evitarlo, pero él no la dejaba en paz.

Siempre quería hablar con ella, y ella decidió esconderse.

-¿Shina?.

La chica regreso sobre sus pasos y encontró a Kinohamaru con algunas bolsas en sus manos.

-Sensei de Boruto.

-Dije que puedes llamarme Konohamaru- el Sarutobi pico su cabeza -¿Que tienes?.

-¿Por qué?.

-Te llame dos veces y no me viste. ¿Esta todo bien?.

-Eso creo.- volvió a caminar siendo seguida por Konohamaru.

-¿Sucedió algo?.

-Estuve evitando a Boruto casi toda la mañana.

-¿Y eso?.

-Es que... escuche todo lo que pasó en su misión de la Niebla. Busque en los libros que se hacen en esos casos por un amigo, pero no encontré nada. Solo.. decidí darle algo de espacio. ¡Pero él me busca todo el tiempo!.

-Entiendo.

-Ahora me estoy escondiendo para que no me encuentre. Pero ahora me siento mal porque lo ignoro. ¿Que debo hacer ahora?. ¿Me escondo el resto de mi vida?. ¿Unos días?. ¿Ya debo hablarle?.

Konohamaru dejo de caminar para poder pensar.

-Solo puedo decirte que sigas a tu corazón.

-¿Seguirlo?.- miro donde estaba su corazón -Pero esta dentro de mi cuerpo. ¿Como lo sigo?.

-Quiero decir que sigas lo que tu corazón quiere. No es necesario que busques todas las respuestas en un libro.

-Mi corazón... A mi corazón le gusta Boruto, ¿quiere decir que debo ir y hablar con él?.

-¿Tu quieres hacerlo?.

-...Si. ¡Si quiero!.

-¿Entonces que esperas?- empujo su cuerpo -Ve y habla con Boruto.

-Si, eso haré. ¡Gracias, sensei de Boruto!.

(...)

Mientras corría miraba en cada dirección, cada lugar, tienda o rincón buscando al Uzumaki.

Se detuvo unos instantes para descansar, el sol ya empezaba a ocultarse y aún no encontraba señales del rubio.

Pero, no podía rendirse.

Siguió corriendo en dirección a su casa, sino lo encontraba en la Aldea entonces ya estaba en su hogar. Doblo en una calle y de pronto lo vio a sólo unos metros junto a Mitsuki, Kawaki, Sarada y el Hokage.

Sonrío. Sus ojos brillaron y corrió otra vez.

-¡Boruto!.

El nombrado volteo y lo primero en ver fue su sharingan, luego su cuerpo cayó al suelo por el repentino peso sobre él.

-Shina. ¿Estas bien?. ¿Que tienes?.

-Lamento mucho no haberte hablado todo el día. ¡Lo siento mucho!.

-Esta bien, pero...

Con ayuda de la chica se pudo de pie otra vez.

-¿Que te sucedió en la cara?- sujeto sus mejillas para verlo de cerca -¿Quien te lastimo?.

-¿Esto?.

-Dime quien lo hizo para dejarlo peor.- frunció el ceño.

-No, no. Esta bien, no lastimes a nadie.

-Oh, esta bien.

-Boruto.- su padre llamó su atención -Nos vemos en casa, no tardes.

-Iré en un rato.

-Nos vemos chicos.

-Adiós, Shina.

Todos se despidieron de ambos, Shina miro el cuerpo de Kawaki y estaba igual que su amigo. Frunció el ceño hacia él cuando este la vio de reojo, simplemente fue ignorada.

-Boruto. Si Kawaki te golpeó solo digo y le daré su merecido. Esta bien tener miedo...

-Estoy bien, Shina. Más bien dime porque me ignorabas.

-Oh. Es que...- jugo con un mechón de su cabello -Escuche todo lo que pasó en tu misión en la Niebla. No sabía que hacer en esa situación contigo, pasaste por muchas cosas y luego.. casi mueres. ¡Quise saber que hacer leyendo un libro, pero... No encontré nada.- bajo la cabeza apenada.

-Shina...

-No sabia que hacer. Simplemente decidí darte tu espacio para que descansaras, no iba a molestarte pidiendo que pelearamos. Pero tu me hablabas todo el tiempo y decidí esconderme de ti. Lo siento.

-¿Que te hizo cambiar de opinión para que me hablaras?.

-Konohamaru me dijo que no buscará todo las respuestas en un libro. Que siguiera mi corazón. Y mi corazón quiere estar contigo siempre...

Boruto sonrío sonrojado ante sus palabras.

-¿Estas enojado por ignorarte todo el día?- Shina levantó un poco su cabeza para verlo.

-Claro que no.- Boruto negó -Lo entiendo. Aun no comprendes del todo a las personas.

Eso hizo sonreír a la chica. No estaba enojado con ella.

-Entonces...

-¿Cuando quieres enfrentarte a mi?.

Shina volvió a sonreír en grande.

-¡Mañana si es posible!. Estuve entrenando mucho y tu sensei me ayudo un poco.

-¿Mi sensei?.

-¡Si!. Me encontró un día y quiso ayudarme, él sabe muchas cosas. También es genial.

-Hmp. No es tan genial como yo...- murmuró sin ser escuchado.

-Entonces te veo mañana para pelear. ¡Le pedí al señor Naruto el lugar de los exámenes chunnin y acepto!. Te veo allí a medio día.

-Esta bien.

-Nos vemos.- abrazo de pronto al Uzumaki.

Al separarse este quedó paralizado, ella siempre olía bien.

-¡N-Nos vemos!.

Al perder su cuerpo de vista se agacho escondiendo su cabeza entre sus brazos. Toda su cara estaba roja, estaba avergonzado por el inesperado abrazo de Shina.

Ahora debía pelear con ella. En las peleas siempre hay mucho contacto. Si se ponía así por un abrazo no quería pensar como se pondría si ella lo acorralara contra una pared.

-Soy un tonto...

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Hola! Que les pareció?

Ahora... que pasara? Quien ganará la pelea?

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Dattebayo!

¿Otra Uchiha?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora