¿Otra Uchiha?

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Mordió su lengua mientras apretaba los botones sin parar, hasta que decidió ver al jounnin en los árboles que los veía fijamente, mejor dicho, veía a Kawaki.

-Cada día es igual. Y ni siquiera se esconde- protesto Boruto.

-No seas así de duro- dijo Shikadai -El enemigo podría aparecer por cualquier parte. Den gracias a que les ponen escolta.

-¿Debo sentirme afortunada?.- pregunto la chica, pero fue ignorada.

-Escolta, claro. Ese tipo es un inútil.

-¡Te oí!- grito el shinobi.

-Es un vigía- corrigió el Yamanaka -Su trabajo es informar de su localización. De eliminar al enemigo se encarga otro equipo.

-Yo podría hacerlo. Le enseñaré mil maneras de mor-

-Tranquila, Shina.- Boruto movio su cabeza de nuevo al juego -Una escolta de 24 horas es más bien vigilancia. El estrés me volverá loco.

-Tu no eres tan sensible. Duermes babeando como un idiota todas las noches.

-¿Quien babea como un idiota?.

-Me lo imagino.

-¡Shina, diles que Kawaki miente!.

-Las mentiras con malas... Boruto. Yo te vi babear hoy cuando fui a tu casa.

-¡No!.

-Tranquilos. El equipo de detección de Konoha es bueno y la Aldea tiene el sistema de detección. Si no es alguien capaz de ocultar su chackra, lo descubrirán enseguida.

-Eso es muy sencillo de hacer. Hasta un bebé podría hacerlo.- dijo Shina.

-Seguro es algo fácil para ti, Shina. Tu siempre eres genial.- corazones aparecieron rodeando a Boruto.

Pero su comentario fue ignorado por la chica quien siguió con su juego, el Uzumaki suspiro rendido.

-Ya lo lograrás.- Shikadai palmeó su hombro.

-Me declare una vez y pensó que actuaba para una película, dime cuando lo lograré.

-Bueno... Es Shina, dale tiempo.

(...)

Miro sorprendida como su amigo rubio era mejor que ella en el juego, apoyo su cabeza en su hombro sin apartar sus ojos de la pantalla.

-Eres bueno en esto, Boruto. Quiero ser como tu.

-Descuida, Shina. Pronto mejorarás, pero aún puedo enseñarte algunos trucos.

Ella sonrío y asintió.

-Voy a tirar la basura- aviso Kawaki.

-¿A estas horas?. Hazlo mañana.- sugirió Hinata.

-Se me olvidara.

La peliblanca levantó la vista hacia el pasillo por donde se fue Kawaki y por alguna razón le picaba el cuello.

-Ah.- miro la hora del relog -Lo olvidé.

-¿Que sucede, Shina?.

-Ya debo irme. Le prometí a Mitsuki volver temprano, pero se me olvidó.

-¿A esta hora?. Ya es tarde, puedes quedarte a dormir, no me molesta. ¡Puedes dormir en mi casa y yo en el suelo!.

-Lo siento. Otro día, Mitsuki me espera. Pero prometo volver mañana temprano y salir contigo.

-Hmp. Bien.

Se puso de pie dejando un beso en su mejilla sin pensarlo haciendo sonrojar años rubio, cruzo la puerta que daba al pasillo y encontró a kawaki parado al lado de la puerta.