Dedicarse a lo que uno ama nunca fue fácil, menos a principios de los 70s, donde Mia Leone , una escritora principiante y soñadora conoce a Robert De Niro, un apasionado actor que sueña con ver su nombre junto a las grandes estrellas de cine en la p...
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⋆⭒˚｡⋆☁︎⭒˚｡⋆ No puedo llamarlo de día, mi padre se molestaría y diría cosas como "No puedes confiar en un actor", me preguntaría "¿Es católico?, ¿va a misa los domingos?". Mi madre, diría que Joey es una mejor opción para mí, Joey es el hijo de su mejor amiga. Me molestaba en la escuela por mis pecas y el color de mi cabello. Ahora que crecí "pregunta por mi", según mi madre.
Por esa razón llamo a Robert casi todas las noches, y no de día, le leo mis poemas por teléfono, siempre esta ansioso de escucharlos. Me dijo que debería escribir canciones, ya que me gusta tanto la música, me dijo que deberíamos a ir a un concierto, al menos esos lugares donde hay artistas amateurs, en Nueva York esta lleno.
Salimos cada viernes de las últimas dos semanas, el viernes pasado solo hablamos y hablamos sobre nuestra vida, el me mencionó que tal vez volvería a trabajar como mozo, ya que se quedó sin dinero, y yo, me sentía asfixiada en mi casa, estaba buscando un lugar a donde mudarme. Me dijo "pensaré en algún nuevo hogar, para ayudarte" tomando mi mano mientras sonreía. "¿Como cuál?" pregunté, "ya sabes algún lugar". Nuestras manos entrelazadas causaban chispas en mi espalda, mi corazón daba un vuelco cuando las tomó por primera vez. Sobre todo cuando me dijo por primera vez que me veía bien y que soy hermosa, mientras recorría sus ojos por mis fracciones. Tenía ganas de besarlo, un hilo invisible nos conectaba, pero no sabía si el quería eso, recién cumplió 27 años, no nos llevamos tanto pero tal vez no estoy a su altura intelectual, él me da consejos como una persona con experiencias, yo recién estoy intentando ser independiente.
El último viernes que nos vimos fue el mejor de todos, mi noche estaba hecha.
No veo la hora de volverlo a ver.
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-¿Ya te irás a dormir, tan temprano?- pregunta mi madre incrédula.
-Si- respondiste mientras cerraba mi bloc de notas.
-¿Estás escribiendo?-.
-Así es-. Respondí seca.
-¿Estás bien?- Insiste.
-Si-.
-Esta bien, te dejaré en paz Mia-. Gira los ojos y da la vuelta. Hasta que se queda pensando algo y vuelve. -No sabes a quien me crucé hoy, en Stravino's- ya sé a donde va esto. DIOS.
-Bueno adivina quien está trabajando ahí-. Termina la frase con una sonrisa expectante.
-¿Joey, tal vez?, no me importa, ¿Sabes? -.
-Me pregunto por ti-.
Le digo de nuevo que no me importa.
-Mia por favor, así nunca conseguirás novio, Joey es un chico agradable-.
-Eso si agradable significa ser un egocéntrico y un completo idiota- le digo con franqueza.
-Es muy dulce, es un buen chico...- La ignoro para no seguir discutiendo.
