capítulo dos

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—cariño, ¿podrías hacerle un favor a la anciana hae?

después de haber hecho algunas entregas de pan, galletas y pastelitos a domicilio, el omega se encontraba comiendo su almuerzo mientras escuchaba un poco de la música de la vieja radio del local de su padre.

—claro, ¿en dónde?

—tienes que dejar esto —le dejó un plato de ramen bien sellado en la mesita donde el omega comía. —en donde están haciendo la casa de la omega woo

termino de comer lo último que había de su plato y tomó lo que su padre le dio, se despidió del alfa con un beso en la mejilla y tomó marcha en su bicicleta morada, dejando lo que iba a entregar en la canasta blanca.

—donde estan haciendo la casa de la omega woo —repitió en voz alta para él.

a lo lejos vio la dichosa obra, observando que habían al menos 6 alfas trabajando y eso le causó inseguridad, siempre que se topaba con alfa terminaba en chiflidos y los llamados piropos, los cuales no hacían nada más que incomodarle.

—nada más pregunto por...

entonces el omega se dio cuenta que ni siquiera le había preguntado a su padre a que nombre iba dicho pedido, quiso arrancarse el cabello pues ya habia llegado al lugar y volver para preguntarle a su padre no era viable, tenia que regresar al centro del pueblo que no quedaba para nada cerca.

"ay, no quiero, relájate koo, solo tienes que ir y preguntar sobre quien pidió comida de la anciana hae y será todo."

se acercó a donde lo alfas, dejando su bicicleta estacionada y tomando el paquete, sintiéndose un tanto tembloroso por las miradas para nada normales de aquellos alfas, pudo ver de reojo que uno de ellos se relamió los labios al mirarle.

—¿estás perdido, lindo? —un alfa se acercó a jungkook de más.

—ah, n-no de yo...

—nosotros 5 te podríamos ayudar con lo que quieras, hermoso —ese era el alfa choi, un idiota al que koo le tenía miedo, no paraba de acosarle cuando lo veía en el pueblo.

se hizo hacia atrás cuando lo vio acercarse peligrosamente a él, el corazoncito del omega estaba que se salía de su pecho por el miedo.

—¡hey, idiotas es mejor que regresen a trabajar! —la voz gruesa de aquel alfa bronceado hizo al omega sentirse repentinamente seguro.

—ugh, aburrido

los alfas se alejaron y el gigante (como lo veía koo) alfa se acercó al pequeño omeguita que mordía sus labios por el nerviosismo de verle nuevamente en ese mismo día.

—que gusto verte otra vez jungkook —sonrió de lado, cautivando al omega. —¿qué se te ofrece?

—ahm, yo venía a dejar este paquete por parte de la anciana hae pero soy tan tonto que se me olvido preguntar para quien era —dijo muy rápido, quedándose sin aire.

—bueno, tienes suerte porque es a mi quien buscas, yo pedí la comida, es que no traje mi almuerzo —se rascó la nuca apenado.

—vaya, jajaja, ehm..entonces tome, espero que tenga un buen almuerzo, provecho —se lo entregó, tragando saliva cuando sus manos se rozaron.

—gracias, koo, ¿puedo decirte koo? —se apresuró a preguntar no quería hacerlo sentir incómodo.

—si, obvio llámame como quieras sí —se calló cuando se dio cuenta que había hablado de más.

—jajaja, está bien koo te voy llamar como yo quiera, nos vemos después, ten un lindo día —se alejó.

el omega se sonrojó brutalmente hasta las orejas al no saber como tomar esa respuesta del alfa, ¿sería una forma de ligoteo? sonó tan seductor cuando le dijo que lo llamaría como él quisiera, quedó pasmado por la respuesta.

"¿escuche bien?"

"¡oh por dios!"

"¿eso fue una insinuación de adultos de las que tanto me cuenta jimin que hace con su alfa?"

"¡ah! ¿pero qué no primero me tiene que cortejar y pedir permiso a los alfas de mi manada para casarnos y así poder hacer esas cosas de adultos?"

"¡se quiere casar conmigo!"

"¿cómo le digo que acepto?"

"¡ay! pero yo no estoy listo para entregar mi lunita"

"lo tengo que hablar con señora luna más tarde, sisisi"

dio un saltito emocionado en su lugar y cuando retomó conciencia tomó su bicicleta emprendiendo camino hasta el local de su padre mientras tarareaba una canción cursi que se sabía de memoria.

—oye, tae, ¿qué le hiciste a mi omega? —preguntó un molesto alfa.

—¿cuál omega?

—no seas idiota, hablo de jungkook

—simplemente me entregó lo que había pedido para el almuerzo y además ni siquiera es tu omega, no seas iluso —rechistó disgustado el alfa bronceado.

—yo lo vi desde hace mucho tiempo más que tú, por antigüedad me pertenece, ¿a poco no idiotas?

—si, choi tiene razón —dijeron al unisono algunos alfas.

—pues no parece muy tu omega cuando lo tienes intimidado, así nunca vas a poder cortejarle y ustedes mejor no sean idiotas y vayan a seguir trabajando porque ya almorazaron

el alfa choi frunció el ceño y se fue a trabajar, para él taehyung solo era un pelafustan más que le quería arrebatar a "su" omega, obviamente él no lo permitiría o bueno eso pensaba el iluso.

• 🍓𖦹ָׁ  besitos y galletas sabor a fresa 𔘓◞  th+jk Where stories live. Discover now