5▬Astrifero noctem

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Era el gran día. Había llegado el momento de prepararme para el baile.

Cuando salí de bañarme me puse el vestido, y dejé mi cabello suelto. Me miré en el espejo del dormitorio, y me fascinó cómo me veía; me encantaba el vestido, y se complementaba muy bien con mi cabello y piel.

Muy nerviosa, bajé las escaleras hacia el Gran Comedor, donde se haría el baile. Me encontraría allí con Neville, ya que estuvimos discutiendo un buen rato quién pasaba a buscar a quién, y como no llegamos a un acuerdo, decidimos que lo mejor fue que ambos fueramos hacia allí separados. A demás de que no tenía mucha lógica, pues ambos convivíamos en la misma sala común.

Caminé intentando calmarme, hasta que me di cuenta de que estaba llegando tarde, y apuré mi paso. Unos metros antes de entrar, frené, y me preparé mentalmente. Solté un suspiro, y formulé un "Todo saldrá bien" para mí misma. Pasé por la puerta sintiendo un revoltijo de emociones, y comencé a bajar las escaleras. No sé si fue por el ruido al bajar las escaleras, o por qué razón, pero todos en el lugar comenzaron a verme; algunos sorprendidos, otros indignados, y otros fascinados, mientras yo buscaba a Neville con la mirada.

Terminé de bajar las escaleras y lo encontré. Estaba hablando con Ginny, mientras tomaba ponche. Justo en ese momento se volteó a mirarme, y yo caminé hacia él. No se movió absolutamente nada desde que su mirada se posó en mí, y aún sentía muchas miradas encima, pero las ignoré.

-Hola. -saludé nerviosa una vez llegué a donde estaban, pasando un mechón de cabello por detrás de mi oreja. Ginny se marchó disimuladamente con su pareja, sin formular ni un solo sonido.

-Hola... -dijo todavía observandome de arriba a abajo, con la boca entreabierta -te ves...

-Es muy exagerado, ¿No? -me preocupé, pues, a decir verdad, era un vestido algo largo y con bastantes capas.

-¡No! -negó exaltado -Te ves hermosa... -su rostro se enrojeció un poco, y estoy segura de que el mío también lo hizo, ya que sentí un calor subir por mis mejillas.

-Tú igual, Nev. -devolví el cumplido, pues era totalmente cierto; dejó su cabello alborotado como tanto me gustaba, se puso un traje de gala que hacía que se viera muy bien, y sus ojos tan bellos brillaban más que nunca. Se veía fantástico.

-Gracias. -sonrió mostrando sus dientes blancos, y en ese momento entraron los cuatro campeones, para iniciar el baile, siguiendo la tradición. No me sorprendió mucho ver a la pareja de Harry, que era una de las gemelas Patil, pues, a pesar de que ellos no tenían ninguna clase de contacto ni comunicación, Harry ya nos había contado sobre ese tema.

Poco a poco se les fue uniendo gente, pude ver a Ginny bailando con Michael, y a Ron, sentado junto a la otra Patil, observandolos con sus celos de hermano. Solté una risita leve al verlo, y Nev se giró a verme.

-¿Bailamos? -cuestioné, y tomé su mano, para llegar a la pista. Era una canción lenta, pero no tanto. Como al estar en el área de baile no se inmutaba, puse sus manos en mi cintura, y luego las mías en sus hombros. Pude ver que sonreía bastante(al parecer inconscientemente), y no pude evitar hacer lo mismo. Aquel momento me generaba demasiadas emociones, y no sé por qué sucedía esto, era un simple baile.

Comenzamos a bailar, y sentía que sólo éramos nosotros bailando al compás de la música, sin nadie más a nuestro alrededor. Sus ojos eran hipnotizantes, e inevitablemente, como siempre, me perdí en ellos. Cada vez él estaba menos tenso o nervioso, y bailaba más fluidamente.

-Practicar te funcionó. -comenté mientras bailabamos, y solté una risita. "Está más rojo que el cabello de un Weasley", reí ante mi pensamiento, y él me miró extrañado.

Libris Et Fungos | ¡! | Neville LongbottomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora