Octubre 1 Del 2018

0 0 0
                                    

Pues fuimos a la escuela ese día,  no parecía que le importáramos mucho a los demás de hecho, aparte de las matemáticas qué tanto odio. Fue algo calmado.

Pero nos invitaron a nosotras dos al karaoke con los demás, a pesar de los pensamientos medianamente ansiosos de Hana al respecto, ella se mostraba con ganas de ir.

Solo era por celebrar un cumpleaños más que nada, pero nos divertíamos tanto todos juntos, bailando, cantando haciendo el idiota. en mi vieja casa esto no hubiese sido posible.
Pero para la canción de Hana, ella no se mostró con ganas, hasta que se tiro un vaso de agua a la cara para animarse subiéndose a la mesa sin muchos reparos.

Solo empezó la canción que quería cantar y con mucha energía iba por esos tres minutos o algo como si se tratase de algún concierto hasta que de repente recordé que la señora Sanko era la cantante de una de las bandas favoritas de Hana. Supongo que lo sentía ese día en especial.
Era intensa, hipnótica en cierto sentido, su voz no era perfecta, pero tenía cierta rabia en ella por algún motivo y apenas termino con la canción. Solo vio al resto en silencio por un momento hasta que le aplaudieron. Se terminó volviendo un manojo de nervios.

Yo seguí después, pero lo de Hana era imposible de superar. Lo que hace crecer en una familia de músicos supongo.

Días Antes De Mi Muerte. Where stories live. Discover now