Capitulo 10

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La puerta de los aposentos de Sandu Shengshou es el lugar que muchos podrían comparar con una versión Di Yu (infierno en la mitología china), donde pocos hombres podrían tener el valor de entrar más de dos veces.

Las puertas dobles estaban decoradas con el distintivo símbolo de loto y las decoraciones rojas por lo alto aún no habían sido removidas; a lo largo de un pasillo poco vigilado, ese era el lugar de la secta más temido del momento.

Hace tan solo unos cuantos minutos atrás, las puertas dobles se habían cerrado con un fuerte ruido, los pobres sirvientes se asustaron tanto que ya no podían quedarse cerca. Su joven maestro tenía muy mal carácter, irritante e irascible; sabían que empeoraría si rondaban afuera de la puerta.

Durante aquel tiempo, hubo todo un caos de murmullos por toda la secta Yunmeng Jiang. Inclusive por el patio frontal, algunos refugiados de la antigua secta Qishan Wen, negaban con la cabeza, limpiándose el sudor de sus frentes mientras lamentaban el destino de aquel afable hombre de blanco que fue llevado por Sandu Shengshou.

Cada persona dentro de ese recinto tenía sus impresiones y suposiciones sobre lo que podría acontecer ahí dentro en la habitación del líder de la secta. Más nadie sería tan valiente como para acercarse a escuchar tras la puerta, no importaba cuán entretenimiento brindara a sus vidas.

Sobraba decir que a ninguno le alcanzaría la imaginación para llegar a acertar sobre lo que en realidad pasaba allá adentro.

—Mmng...

Lan XiChen emitió un gemido, sintiendo que su garganta ardía más que cualquier otra parte del cuerpo. Sus esbeltos dedos blancos se curvaron y atrapó algo de las sábanas hechas bola sobre la cama; luego lentamente sus parpados ascendieron, casi como si estuviera medio dormido o despertando de un desmayo.

No tenía los pensamientos ordenados, de hecho, su mente estaba completamente en blanco y no recordaba cómo había llegado a ese lugar y momento.

Se giró sutilmente sobre la cama... "Oh, estoy en la cama" el primer pensamiento le llegó, luego de una sucesión de punzadas a su cadera. Lamentablemente, había recordado un poco tarde que estaba lastimado, siendo la impresión del dolor lo que lo sobresaltó y accidentalmente apretó algo.

—Tsk, eso duele.

La voz tan severa lo llenó de impresión. XiChen se giró intentando alejarse, pero debido al exceso de fuerza usado, terminó por caer de la cama.

La cabeza le dio vueltas con el golpe que se dio contra el duro suelo; sin embargo, antes de que lograra sentir el dolor en la parte inferior de su cuerpo, un par de brazos fuertes lo rodearon por la cintura y lo atraparon antes de que cayera completamente.

Al parecer, esta otra persona que lo ayudó, había reaccionado tan rápido que terminó con una pierna al aire y el resto del cuerpo sobre la cama. Un pequeño frasco rodó por un lado y se estrelló contra el suelo, así como también una palangana con agua que terminó pateando en el proceso.

—¡¿Intentas descomponerte todavía más?!— lo regañó.

Las manos en su cintura hicieron más presión, hasta atraparlo de la ropa y simplemente tiró de ella para traerlo de vuelta a la cama.

Lan XiChen exhaló sin volver a emitir algún sonido de dolor, a pesar de la torcedura a su cintura. Fue levantado tan brusco, ahora estaba mareado; aunque lo que más lo distrajo al momento fue un delicado aroma empolvado, con un toque herbáceo y anisado. Lo tenía muy cerca de la nariz, junto a una tibieza que solo puede desprender la piel ajena.

Sin pensarlo, todavía con la vista medio desenfocada, levantó sus manos y atrapó ese cuello que le estaba estimulando el olfato.

Cuando tocó, sintió el temblor de la persona y recibió un fuerte manotazo.

Capturando a la Belleza [ChengXi]Where stories live. Discover now