El Apagón

73. Un paso más

Amelia amanecía aquel día en tierras italianas, después de su cuarto viaje a Roma, donde empezaba a ser costumbre pasar una semana al mes. Desde que se había bajado del avión no había dejado de llover, y con tanta lluvia era imposible no pensar en su novia, la lluvia se había convertido en algo así como el sello de identidad de algunos de sus momentos más importantes juntas. Se empezaba a acostumbrar a aquel país que tenía cierto encanto, y no solo por su pizza, aunque aquel temporal era un poco desesperante porque casi ni habían salido del hotel más que para ir al teatro. Como siempre, al despertar, cogía su teléfono móvil.

Amelia: Buenos días cariño mío♥️

Amelia: Ya solo quedan dos días para estar contigo... Me muero por tenerte entre mis brazos😊

Se metía en la ducha, ponía algo de música y al salir allí estaba su esperada respuesta.

Luisita: Buenos días amor♥️

Luisita: Espero que tengas muy buen día!

Amelia: Seguro que si, aunque contigo sería mejor...

Luisita: Bueno, dicen que todo llega...

Amelia: Te amo Luisi, luego te llamo en tu descanso.

Aquel día Amelia había aprovechado las horas de sueño al máximo y al mirar al hora se dio cuenta de que era algo tarde. Tras vestirse bajó a desayunar y se encontraba con Natalia y Ana.

- ¡Buenos días dormilona! - Decía la rubia. - Tu sin prisas...

- ¿Me habéis dejado algo?

- Yo me daría prisa Meli, están empezando a recoger - Decía la pelirroja.

- Amelia, luego pásate por mi habitación que te tengo que enseñar unas cositas que le compré ayer a Laila. - Decía Ana con los ojos llenos de ilusión.

Amelia terminaba de desayunar y al volver a la habitación se daba cuenta de que ya era la hora del descanso de Luisita, se había convertido en una costumbre llamarla a esa hora para escuchar su voz, aunque aquel día todo para ella iba con retraso. Marcó y pudo escuchar un tono, dos tonos...

- Venga Luisita, cógelo... - Decía Amelia, consciente de que aquel día tenía algo menos de tiempo para hablar con su chica.

Pero no hubo respuesta, Amelia no le dio mucha importancia hasta que se encontró un mensaje de la rubia.

Luisita: Tengo mucho lío, sorry...

Amelia: Solo quería escuchar tu voz😊

Luisita: Luego hablamos.

Amelia al principio no le dio mucha importancia, pero luego fue repasando los mensajes de aquel día en los que notaba a su novia un poco fría y se extrañó, iba a preguntar cuando su puerta sonó.

- Si Mahoma no va a la montaña... - Decía Ana, que venía con una bolsita.

La rubia empezó a enseñarle un montón de tonterías que le había comprado a Laia y Amelia no hacía más que pensar en Luisita. Ana la notó extraña y no dudó en preguntar.

- ¿Estás bien amiga?

- Un poco... No sé... ¿Cómo lleva Laia tus viajes? - Preguntó Amelia.

- Está súper orgullosa de mi, se lo va diciendo a toda su familia, que tiene una novia famosa que actúa hasta en Roma. Y bueno, con el dinero que estoy ganando y su ascenso en el call center pues... Entre eso y lo bien que nos va, sentimos que es el momento de dar un paso más, así que... ¡Nos vamos a vivir juntas! ¿No es genial? Nunca pensé encontrar alguien así... - Decía ilusionada y Amelia sonreía al verla tan contenta, cuando hablaba tan de carrerilla le era imposible no acordarse de Luisita, las dos hacían lo mismo, una conversación entre las rubias se volvía un dialogo en el que sentías que te faltaba el aire hasta a ti.