El heredero (Nammin)

Tendremos un Bebe.

Namjoon

Los meses se me habían ido volando, faltaba poco menos de un mes para que nuestro bebe ya estuviera en casa, Jimin se veía todavía mas hermoso de lo que es con esas mejillas un poco más regordetas además de que su trasero era glorioso en los pantalones de gestación.

—Señor, Su pareja le llama.

Cuando estaba en junta la única razón para ser interrumpido era si se relacionaba con Jimin, mis inversionistas y demás empleados no podían siquiera pestañear una señal de molestia al respecto sin que fueran despedidos.

—¿Cariño?

—¿POR QUE NO CONTESTAS EL MALDITO TELEFONO?

—Perdona, estoy en una junta, ¿Qué sucede? ¿Te sientes mal?

—Soy una vaca —se puso a llorar —no me pude poner los zapatos yo solo, pues no me puedo mover demasiado, toda la ropa me queda horrible, soy demasiado gordo.

No quería reírme, pero para él esto era una emergencia, se había vuelto tan mimado que yo no podía estar mas feliz, que me llamara para algo tan absurdo para cualquier otra persona, pero a mi me encantaban hasta estos detalles.

—Eres hermoso —hice señas para que todos salieran de la sala de juntas —déjame verte.

Le marque con mi teléfono para hacerle la videollamada, estaba con la cara roja, llevaba un suéter color amarillo claro con rayas blancas, se le notaba lo mucho que había llorado, puso el teléfono en alguna superficie plana y se alejo un poco, soltando un llanto de nuevo.

—Ni siquiera entro a cuadro —se sujeto el vientre—soy enorme, TU TIENES LA CULPA, si no fueras tan grande tu hijo no seria tan enorme en mi vientre.

—No puedo creer que cada día luzcas mas lindo, no hay nada que no me guste de ti, no tienes porque sentirte mal de tu aspecto, eres perfecto y me tienes a mi para recordártelo.

—Eres un idiota —empezó a gimotear de nuevo —te vere mas tarde, te adoro Nam.

—Te amo mi pajarillo.

Me colgó, aun no me había dicho las mismas palabras, pero estaba bien, todo a su tiempo, ya es mío y sé que pronto escucharlo decirme que me ama tanto como yo lo amo a él. Dijo que saldría a una sesión de fotos que haría, es de sus últimos trabajos antes de guardar reposo para el parto, pero mi lado paranoico no me dejaba tranquilo, así que tenia seguridad y su chofer particular.

Se que es raro que un fotógrafo cuente con tanta seguridad, pero la verdad me importa poco lo que piensen, no dejare que mi pajarillo ande como si nada por ahí.

—Creo que eso es todo, mañana me agendas la reunión con los chicos de arabia, para la tarde quiero que este todo libre, tengo cita medica con mi pareja y no quiero nada de pendientes.

—Si, señor, ¿Y el señor Min?

—Tomo permiso hoy para hacerle una sesión a su prometido —en eso cuadre muchas cosas —¿Dónde está mi teléfono?

Marque un par de veces y Yoongi me contesto.

—¿Qué pasa?

—¿Jimin esta contigo? —se quedo en silencio —Contéstame animal.

—A Hoseok le gusta como trabaja, no puedo decirle que no, tu mejor que nadie sabes que pasa con las hormonas de los donceles en cinta, son como fieras.

—Me dices que mi pajarillo esta en el nido de los Jeon, te voy a asesinar Min.

—Esta conmigo descuida, además ya casi terminan la sesión —escuche una voz al fondo —todo está bien.

—¿Esa era la voz de Jungkook?

—No se de que hablas, bueno tengo cosas que hacer adiós Nam.

Me colgó y me sentí furioso, Jungkook no respetaba para anda lo que tenia con Jimin, se que visitaba la galería de vez en cuando para verlo, también de que esta al pendiente de él a través de su hermano Hoseok que era el único que tenia permitido pisar mi casa. Fume como nunca este día, no podía llegar a la sesión y simplemente patear a Jungkook para que se fuera, Jimin me mataría si hago algo así.

Sonó mi teléfono de repente con una llamada de mi pajarillo, mi corazón se sintió aliviado en cuanto vi el remitente.

—¿Mimi?

—¡Tendremos un bebe!

—Lo se amor.

—NO LO ENTIENDES IDIOTA —se escucho que pujo —VOY CAMINO AL HOSPITAL, TU HIJO QUIERE NACER AHORA.

Tome las llaves del auto y salí lo más rápido que pude de la casa, las leyes de transito estoy casi seguro que no se aplican a futuros padres, al menos eso espero porque no existían los límites de velocidad ni los semáforos en rojo, en cuanto llegue mire a Yoongi con Hoseok de la mano sentados en la sala de espera a su lado estaba el idiota de Jungkook.

—¿Jimin?

—En la sala de partos, no dejo que nadie lo acompañara hasta que tu llegaras —Yoongi me aviso.

—Yo me ofrecí, pero me corrió —una enorme sonrisa se me dibujo.

—Es lógico, tu no eres nada de mi pajarillo.

—Tu solo eres el padre del bebe, pero de ahí en mas —alzo las cejas —yo también podría ser buen padre.

Iba a sujetarlo por el cuello y estrellarlo contra la primera cosa que encontrara, pero Yoongi se interpuso.

—Jimin te esta esperando.

Corrí hasta el área de partos, Jimin estaba en una camilla con las piernas sobre un tipo de rampilla, me colocaron una bata y gorro rápido, me acerque y me tomo por el cuello de la camisa.

—¿Dónde diablos estabas? —su cara se puso roja ante una contracción —¡Maldición me voy a morir!

—No es así, solo un poco más, tiene buena dilatación y esta coronando bien, un poco mas señor Park y tendrá a su bebe aquí.

—Ya lo oíste mi amor —sostuve su mano y volvió a pujar, de la nada escuché un llanto— bien amor ya está aquí.

Mire a la doctora que sostenía una pequeña bola roja que empezó a llorar de nuevo con más fuerza.

—Sus pulmones funcionan —dijo la doctora y se levanto con ella mientras le limpiaba las fosas nasales y la boquita —es una preciosa niña, felicidades.

La pusieron en los brazos de Jimin que se la empezó a besar en cuanto se la acerco al rostro, yo no dejaba de sonreír como idiota y sentir como se me escapaban algunas lágrimas.

—Es perfecta, es tan bonita.

—Se parece a ti —bese su frente y después a mi pequeña —no puedo estar más feliz.

—Te amo Nam.

Creo que me desmaye después de eso.

¿Como desean que se llame la pequeña?