29

4.9K 750 502
                                    

Les dejo doble actualización. Espero que disfruten ❤️

Dedicado a byubyyss ✨

«Héroes en la vida real»

Astra

Me odiaba a mí misma por sentirme tan cómoda en aquel vestido, recibiendo atención de más de una docena de trabajadores de Connektd, sabiendo que iba a bajarme en una avenida y cientos de personas me estarían esperando. Mi papá me había dicho una vez que las personas nos acostumbrábamos fácilmente a las cosas buenas, tal vez por eso una parte de mí quería quedarse con esta vida.

Era una persona horrible, egoísta, hipócrita. Zaid había muerto unos días atrás, y ahí estaba yo: fingiendo que no había pasado nada, yendo a un canal de televisión para que mi equipo quedara bien, para buscarme oportunidades, para... lavar la imagen de los juegos.

—Estamos cerca —anunció el chófer de la camioneta, mientras disminuía la velocidad—. Algunas calles están cerradas, solo nos darán acceso a nosotros. Hay muchas personas.

Cayla tenía la mirada perdida en los edificios que nos rodeaban y vi que jugaba con las manos de manera nerviosa. Debido a lo que le habían hecho años atrás, entendía que venir a Neopolis, el centro de la ciudad, le generaba mucha ansiedad. Maddox portaba una mirada de alerta, estaba tenso, como si supiera algo que nosotros no. Maddox siempre observaba todo y nunca decía nada. Me habría encantado saber cuáles eran sus pensamientos relacionados con Arcadis, a Frederick, a nosotros.

Cuando llegamos a la sede del canal de televisión, el principal de Harlax, un montón de escoltas rodearon la camioneta. Los gritos de las personas casi me ensordecieron cuando se abrió la puerta. Un hombre alto me ayudó a bajar —dado que el vestido, si bien era hermoso y despampanante, resultaba incómodo para moverme—, y cuando el público me vio, la ola de gritos se hizo más aguda. Saludé a algunos y me acerqué a la barrera que nos separaba para darle la mano a algunas niñas que no pasarían de trece años.

Me entregaron fotografías mías y me pidieron que se las firmara. Lo hice con las manos temblorosas, aunque con el corazón cálido. Por un lado, me pareció tierno que ellas me vieran a mí como un ejemplo, como ícono al que admirar, cuando yo no era más que un desastre y una don nadie. Por otro lado... Temía que ellas idealizaran lo que estaba pasando. No quería que mi figura les motivara a participar algún día en Arcadis, o en algún otro juego o programa que se lucrara de sus desdichas. Pero ¿cómo les decía eso sin afectar la imagen de mi equipo?

Cassian apareció a mi lado con una sonrisa tan natural, que por un momento pensé que estaba cómodo con la situación. A veces me daba un poco de miedo lo bueno que era Cassian fingiendo que todo estaba bien, que tenía todo bajo control, que era inquebrantable. Si no hubiéramos tenido conversaciones honestas donde él mostrara sus vulnerabilidades, seguiría suponiendo lo peor. Algunas veces, también, pensaba que todas esas vulnerabilidades eran mentira. Pero la mayoría del tiempo quería creer que seguía siendo el mismo chico que me robó el corazón cuando era una niña.

—No te alejes mucho de mí —me susurró al oído, cosa que enloqueció a la gente. Sonreía como si me estuviera diciendo algo seductor, cuando su voz estaba tensa—. Hay muchos policías cerca.

—Eso quiere decir que estaremos seguros.

En South Rednett, que hubiera policías cerca era sinónimo de redadas, violencia y sangre. Pero quería creer que en Neopolis era distinto, que, de hecho, nos protegerían a nosotros.

—Algo no está bien. Maddox está en estado de alerta y hay demasiados policías.

—Pero solo hay fans, todo estará bien. Casi todos son niños y adolescentes. Si algo estuviera mal, pedirían a los menores de edad que fueran a sus casas.

Arcadis: El juego ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora