Capítulo 16: Localización de hermana (Parte 3)

14 4 0
                                    

"Descubre quién eres, y hazlo a propósito".

- Dolly Parton.

Desperté en un extraño traje, sintiéndome mareado y desorientado. Me agité, tratando de liberarme de él, pero fue en vano. Todo estaba oscuro y muy, muy frío. Apenas podía ver bien el interior del traje. Era inútil ver alguna forma de salir, por lo que seguí forcejeando. Fue entonces cuando escuché la voz de Baby resonar en la habitación.

—Shh, quédate quieto y en silencio. Has estado durmiendo durante bastante tiempo —susurró Baby—. Creo que notaron que no saliste del edificio anoche. Las cámaras te estaban buscando, pero no pudieron encontrarte. Te tengo escondido demasiado bien... te secuestré.

Noche 4.

Sus palabras solo aumentaron mi confusión. No entendía completamente lo que estaba sucediendo, pero sabía que no debía temerle a Baby. 

—No tengas miedo, no te voy a lastimar —continuó Baby en un tono calmado—. Solo te voy a retener por un rato. Eso sí, trata de no moverte. Estás dentro de algo que salió de mi antigua pizzería. No creo que se haya usado nunca, al menos no de la forma en que se suponía que debía usarse. Demasiado peligroso. Es lo suficientemente grande como para que quepa una persona dentro, pero solo apenas. Estás en el Scooping Room. ¿Sabes por qué lo llaman Scooping Room? Es porque, tontito, esta es la habitación donde usan el Scooper. Pensé que sería obvio. ¿No es un nombre divertido para algo? El Scooper. Suena como algo que usarías para helados, cremas o pasteles. Suena como algo que querrías en tu fiesta de cumpleaños para asegurarte de obtener una gran porción de todo lo bueno.

La voz de Baby llevaba consigo un escalofrío inquietante. Me esforcé por comprender el alcance de sus palabras, pero la confusión seguía dominando mi mente.

—Me pregunto, sin embargo, si fueras un medio litro de helado recién abierto, cómo te sentirías acerca de algo con ese nombre —continuó Baby, en un tono que oscilaba entre lo siniestro y lo intrigante—. Afortunadamente, no creo que un medio litro de helado recién abierto sienta algo en absoluto.

La inquietante charla de Baby fue interrumpida por un nuevo acontecimiento. La voz de Baby se volvió tensa mientras advertía la presencia de alguien más en el edificio.

—Oh, oh... parece que hay alguien más en el edificio. Shh —susurró Baby.

Pude oír como se abría la puerta de la sala.

—De acuerdo, tráela. Adelante. Más... más... Ok, detente. Bájala. Ten cuidado con el escalón — dijo una voz masculina. 

—¿Qué le pasó esta vez? Parece que estas cosas no pueden estar ni un día sin romperse —comentó otra voz.

—¿Quién sabe? Siempre es lo mismo, hombre. Algún tipo de mal funcionamiento del hardware.

—Bueno, tengo que estar en un lugar en quince minutos, y este lugar me da escalofríos... ¿podemos terminar con esto?

—Está todo automatizado, no tenemos que estar aquí para esto. Solo ponla en los rodillos y podremos irnos.

Mientras escuchaba esa conversación, percibí un fuerte sonido metálico, seguido de otros ruidos aún más estruendosos, similares al choque de tapas de ollas y al zumbido de una rasuradora. El ruido se acercaba cada vez más, hasta que vi a Ballora frente a mí, siendo transportada por una máquina. El ruido era ensordecedor, pero de repente la máquina se detuvo y el silencio se hizo inquietante.

—Hay algo muy importante que he aprendido a hacer con el tiempo, ¿sabes qué es? Cómo fingir —dijo Baby en tono enigmático—. ¿Has fingido alguna vez? ¿Pretendes ser de una manera cuando en realidad eres de otra? Es muy importante. Ballora nunca aprende, pero yo sí. Piensan que hay algo mal en el interior. Lo única cosa que importa es saber cómo fingir...

Five Nights At Freddy's: La Historia Completa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora