Five Nights At Freddy's: La Historia Completa.

Capítulo 21: Gran reinauguración (Parte 3)

"De lo que tengo miedo es de tu miedo".

- William Shakespeare.

Me había quedado más tiempo despierto del que debería. Sabía que William Afton tenía que ser el eje central de todo, debía ser el culpable de las grandes polémicas que ha tenido la empresa. El debía recibir una pena mayor que la cárcel; mis hipótesis me llevaron a pensar de que todo esto viene de mucho antes, quizás el incidente con su hija, Elizabeth Afton, debía ser consecuencia de la negligencia del propio William Afton. Tal vez, la desaparición de los niños en su antiguo local, Circus Baby's Pizza World, fue algo causado por él, y la reciente desaparición de otros cinco niños en este mismo restaurante lo apunta aún más como sospechoso. No sé que haría con esta información, pero sabía que mi trabajo para recaudar dicha información estaba a punto de llegar a su fin.

Noche 5.

Regresé al local la noche cinco, y ya estaba preparado para la llamada del tipo del teléfono.

—¿Hola, hola? ¡Oye, buen trabajo, noche cinco! Um, hey, uh, vigila de cerca las cosas esta noche, ¿de acuerdo? Uh, por lo que entiendo, el edificio está cerrado. Uh, nadie puede entrar o salir, ya sabes. Especialmente con respecto a cualquier... empleado anterior. Um, cuando lo solucionemos todo, podemos pasarte al turno de día. El puesto solo está... disponible.

Todo esto se me hacía demasiado extraño. El tipo del teléfono parecía muy nervioso con respecto al cambio de turno. ¿Tendrá algo que ver con el guardia diurno?

—Uh, todavía no tenemos un reemplazo para su turno, pero estamos trabajando en ello. Vamos a tratar de contactar al dueño original del restaurante. Uh, creo que el nombre del lugar era... "Fredbear's Family Diner" o algo así. Aunque estuvo cerrado durante años, dudo que podamos localizar a alguien. Uh, bueno, ¡solo aguanta una noche más! ¡Aguanta ahí! Buenas noches.

El restaurante de Fredbear's era propiedad de William Afton. Todo parecía conectar con él, y quizás, tan solo quizás, ese guardia diurno que menciona el tipo del teléfono sea él. 

Traté de enfocarme en el presente e intentar sobrevivir una noche más. En esta noche, los animatrónicos estaban más activos que nunca. Nunca pensé que aquel 8 de noviembre sería el inicio de la experiencia más espeluznante de mi vida, pero ya tenía todo lo que quería saber, solo debía aguantar una noche más y todo estaría arreglado. 

Momentáneamente, tuve que romper mi estrategia de solo mantener la cámara de la caja de música para revisar rápidamente partes y servicios, puesto que sentía algo venir de ahí, no sabía que, pero mi instinto me decía que revisara. Cuando vi la cámara, me petrifiqué por un momento. Ante mis ojos estaba una versión de Freddy morada, sentada en el suelo de partes y servicios. Era demasiado oscuro, parecía hasta una sombra; sin embargo, quité la cámara rápidamente, pues de seguro era una alucinación de mi parte debido al miedo que sentía en esa noche.

La tensión aumentaba a medida que avanzaba la noche. Los animatrónicos parecían coordinar sus movimientos para acorralarme, y cada vez era más difícil mantenerlos a raya, eran diez brutales enemigos a los que debía enfrentar yo solo.

En un momento, vi a Chica acercándose rápidamente por el conducto de ventilación. Actué rápido y me puse la máscara, pero algo salió mal y ella logró entrar a la oficina. Sus ojos me miraban fijamente mientras estaba paralizado por el miedo. Cerré los ojos esperando lo peor, pero cuando los abrí de nuevo, Chica había desaparecido.

La adrenalina corría por mis venas mientras seguía enfrentando a los animatrónicos. Cada vez que los veía acercarse en las cámaras, me apresuraba a ponerme la máscara para protegerme. Cada error podía ser fatal, y sabía que no podía permitirme bajar la guardia.