Él logró destruir lo que me costó crear, su poder sobre mí era absoluto, porque a pesar de que estaba planeando mi derrota frente a mis ojos, la ignorancia disfrazada de confianza se apoderaba de mi razón. Yo no era tonta, mi corazón fue embrujado y mi razón neutralizada, ambos cayeron en el juego malévolo de mentiras contadas por el hombre en quien creía ciegamente.
Sincerely, elle.
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Una bruma de sentimientos que tengo que dejar ir
PoetryAntología by elle. Ella no era blanco, ni siquiera negro, solo era una paleta de grises. Vagaba en la nada y en el todo, tal vez era esencia de ambas o de ninguna, nadie lo sabía y ella tampoco porque se lo cuestionaba y respuestas incoherentes obte...