Antología by elle.
Ella no era blanco, ni siquiera negro, solo era una paleta de grises. Vagaba en la nada y en el todo, tal vez era esencia de ambas o de ninguna, nadie lo sabía y ella tampoco porque se lo cuestionaba y respuestas incoherentes obte...
Ayúdame con tu santa gloria para superar todo este rencor de mi alma, que me tiene agonizando en esta vida que me fue dada, estoy cansada de llenar mi vacío corazón con sentimientos negativos que hacen del disfrute de mi día a día aún más miserable. Responde las súplicas de esta pobre alma en penitencia. No soy una persona que merezca de tu atención pero en este momento me tienes de rodillas suplicando un poco de tu perdón.
Es tan difícil para mi seguir sin mirar mi alrededor y las bajezas por las que voy vagando, ¿acaso no soy merecedora de un sueño digno? Me cuestiono porque puedo notar que hay demonios que alcanzan el cielo a pesar del pasado insano que pisotea sus talones.
A veces me gustaría ser tan segura como los demonios que me rodean, creen que el mundo debe besar sus pies y las pobres almas que cuentan con valores benevolentes mantienen la boca cerrada ante injusticias, porque si abren la boca tan solo para bufar serán constantemente acosados por las calumnias dichas a los demonios.
¿Qué es correcto y qué no lo es? Espero no llegar a mi punto de desborde porque seré quemada en la hoguera por todo el fuego que saldrá de mi alma. Me mantengo serena y juro que estoy siendo honesta ante mis pensamientos de mantenerme fuerte y no lanzar todo por la borda. Lo juro.
Mientras más pasa el tiempo me doy cuenta de que estoy siendo abandonada y no por alguien ajeno sino por mi. Mi sensatez ya está siendo consumida por la desesperanza que abunda en cada respiro que da mi alma, mis pulmones ya están llenos de una bruma intensa que no deja espacio para tal fe que me mantenía viva en los brazos de la benevolencia. No puedo culpar a nadie más que a mi, pero quisiera tener un poco de ayuda para mantenerme en pie ante cada humillación y desprecio que vivo. Quisiera seguir poniendo mi otra mejilla pero ya está ardiendo de dolor, a pesar de que tiene una alta tolerancia ante este.
Me hundo en lágrimas porque ya estoy cansada, mi cuerpo tiembla desesperado por soltar todo el veneno que tiene atorado en la garganta, este está siendo obstruido por el gran nudo de raciocinio que interviene para que mantenga mi alma en el lado bueno de la vida. No me quiero pudrir en el mal pero ya estoy flaqueando ante la derrota, por favor dame un poco más de fuerza para morir de manera honesta en la fidelidad de mis creencias y valores, no me dejes caer. Y sí, estoy rogando.
¿Qué tan desesperada tengo que estar para rogar una pizca de ayuda?
Sincerely, elle.
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