El cazador.
Aileen Georgiou vivía en una muy fea pesadilla.. sus ojos solo captaban oscuridad y su cuerpo unas frías cadenas que la amarraban a un espantoso sótano.
Sus fosas nasales solo olían a.. «acónito» ese olor que cada vez se hacía más fuerte...
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Capitulo 68
Hope Mikaelson.
Suspiré. Entre a mi clase dejando mi mochila aun lado, gire mi rostro encontrándome con la pequeña Argent.
Está hablaba muy sonriente con Lydia que escuchaba atenta. Pude detallar a la argent, llevaba una falda negra corta, con una blusa blanca de manga larga que solo estaba abrochada en el botón de arriba y unas zapatillas negras altas. Joder, su cabello caía en su espalda..mi mirada bajo siguiendo el recorrido de su cabello hasta llegar a su trasero. Relamí mis labios al subir mi vista viendo como su sostén lograba verse en esa blusa.
—¡Hope! —dijo Lydia sonriendo.— Ven aquí, estábamos hablando de que comeríamos está tarde, ven.
Camine a ellas. Lydia era bonita, pero no era mi tipo. Suspiré caminando a ellas antes de llegar colocándome alado de Allison que sentí como se enderezó al sentirme alado de ella. Me encantaba esa reacción que le causaba
—¿y que planeaban? —dije mientras colocaba mis manos en el comedor.—
—Pues, queríamos comer pizza. ¿Que opinas?
—Me parece bien. ¿Que dices Allison?
Ella se quedó callada. Sabía que estaba nerviosa, su olor la delataba. Lo que me hizo sonreír fue ver esa marca en sus pechos.
—Todo está bien..—murmuró Allison antes de mirar a Lydia.— ¿Que te parece a ti?
—A mí me parece que ustedes dos tienen algo que contarme.—dijo Lydia mirando a ambas con una sonrisa pícara.— En primera, no me salgan con "no paso nada" porque Allison, querida, las marcas de tus pechos no son nada discretas y Hope, tu tienes marcas en el cuello. Así que, casualidad no es
Mire a allison.— Anda Allison, respondole.
Ella me volteo a ver indignada por lo que acaba de decir. Sentí su enojo haciéndome sonreír
—¿¡Yo!? Explícale tu, tu fuiste no yo.
Me acerque a ella dejándonos a una corta distancia.
—Yo te bese, pero tú también lo hiciste
Lydia abrió su boca sorprendida
—¡Tu me rompiste la blusa!
—Y las bragas también.
—¡Okey chicas! —dijo Lydia sonriendo.— ya entendí, muchas gracias. ¡Tu y yo, tenemos una plática pendiente! —señalo a Allison.— ¡Y tú! —me miro.— Las bragas no se rompen, por si no sabías, un consejo que me dió Aileen. Las bragas no se rompen, te las quedas y las guardas.
—¿Que? —dijimos ambas mirando a Lydia que sonrió.—
—¡Ya empezó la clase, bye!
Miramos a Lydia que salió corriendo yéndose a otro asiento donde se sentó con Malia dejándome sola con Allison
