[Gemelos Miya x Male Oc]
Esto es un juego entre nosotros tres. Nos amamos, nos deseamos, pero como todo juego tiene su dificultad.
Nekomata Aki tendrá que pasar por el hermoso camino de estar en una relación, pero no cualquier relación, no, esta es...
N/A: Este capítulo contiene escenas sexuales explícitas a mitad del capítulo, si no es de tu agrado este contenido recomiendo saltarlo. Para los que se quedan a leer, les deseo una agradable lectura <3
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AKI NEKOMATA invitó a sus mejores amigos y novios a su hogar luego de aquel partido. Tenía nervios por presentar a sus novios —aunque el plan es empezar diciéndole que son amigos para ir poco a poco— por primera vez a su abuelo, el pobre hombre jamás conoció a los Ojiro ni a los Miya, así que a Aki le daba un poco de ansiedad y nervios todo el evento.
Para su decepción, su abuelo se fue a beber con sus amigos y otros profesores, y cuando lo fue a buscar estaba completamente borracho así que solamente se fue a dormir. Sus amigos se quedaron a dormir, le dio su cama a Sarami y él durmió en el suelo con Aran y los Miya, cabe recalcar que el moreno se puso en medio porque no planeaba que en mitad de la noche se pusieran mimosos junto a él.
Y cito:
—Tengan piedad por el pobre y algo de vergüenza mientras estamos aquí. Apoyamos totalmente su relación, pero en serio, no tengo ganas de presenciarlos siendo cariñosos. —Suplica molesto, separando a Aki de los gemelos que tenían cara de cachorrito.
Atsumu en más de una vez trató de pasarse al otro lado, pero luego de varias quejar de Aran y un golpe de Sara, se quedó dormido y usando a Osamu como almohada.
Al otro día, Aki se despertó temprano como siempre para hacer su rutina de limpieza facial, Sara se le unió poco después ya que también despertó temprano, pero lo esperó para poder levantarse sin vergüenza por estar en casa ajena. Ya vestidos, Sara le estaba pintando las uñas en la sala cuando llegó su abuelo ya despabilado.
—Oh, buenos días ¿quién es la jovencita tan encantadora? —Sarami se levantó para hacer una reverencia, lo que sorprendió al mayor — ¡Oh! ¡Qué alta! ¿Haces algún deporte?
—Juego vóley femenino... aunque pronto seré mánager del equipo masculino porque no hay chicas en el equipo. —Confiesa algo apenada.
—Eso está bien, siempre y cuando disfrutes de lo que haces. —Asiente sabiamente el mayor, antes de recordar algo importante —Me dijiste que te llamas Sarami ¿No? Puede ser que... ¿Seas la amiga multi tareas de la que mencionó mi nieto?
Aki se tensó por la mirada de muerte que le dedicó su mejor amiga, pero fue salvado por el espíritu santo —Aran— que llegó cambiado y sin rastro de sueño a la sala para saludar al abuelo Nekomata quien tuvo la misma reacción por su enorme altura. El último en bajar fue Osamu, aunque este llegó con un gran desayuno para dar la mejor impresión al hombre.
—La comida de Samu sigue siendo la mejor~ —gime del gusto, con las mejillas infladas por las grandes porciones que masticaba. Osamu se sonrojó y bajó la mirada algo apenado por los comentarios, su corazón no deja de acelerarse por el hecho de que su novio desfrute demasiado su comida. Sarami lo miraba con asco.
