You... (Aonunete)

╰─►06⸙͎ - ≡

- Lo tenemos.

Dijo Tonowari mientras miraba a sus dos hijos.

- ¿Cómo?

El mayor le tendió un expediente a su hijo, el cual lo abrió, revisando el nombre.

Neteyam te Suli Tsyeyk'itan

El rostro del chico con el que había estado pasando sus días, tardes y noches se abría paso en una fotografía.

No...

- ¿Lo reconocen?

El mayor preguntó, Tsireya asomaba su cabeza por el expediente, logrando ver la cara de su amigo.

Ambos palidecieron, pero la mente de Tsireya la ocupó algo más que el simple hecho de que su amigo fuese el blanco que buscaban.

Si Neteyam era la persona que tenía su padre en la mira... Y Lo'ak era su hermano...

Lo'ak te Suli Tsyeyk'itan

Los ojos de la chica picaron, amenazando con soltar lagrimas. Pero se contuvo.

- Si no lo hacen, necesito que los busquen. Que se ganen su confianza y que los envuelvan, no es la primera vez que tienen una misión como esta... Creo que entienden el punto.

Ambos asintieron, después de aquello se retiraron de la oficina de su padre.

Ambos fueron al cuarto de la chica, adentrándose en el y cerrando la puerta con seguro.

- ¿Qué haremos?

- No lo sé.

Ao'nung se agarraba la cabeza mientras miraba el suelo, eso realmente no podía estar pasando.

Ese chico de linda sonrisa era su blanco.

No lo podía creer.

- Sabes lo que significa el que Neteyam sea el blanco verdad?

- Que en parte... Lo'ak también lo es.

La chica le había respondido de forma triste y a ambos solo les quedó abrazarse, tratando de darse consuelo mutuamente por aquello de lo que se acababan de enterar.

- Reya... Estamos a tiempo de no involucrarnos más con ellos... Por lo menos no sentimentalmente.

La chica agachó la cabeza, no quería hacerlo.

- Princesa...

Su hermano la tomó del mentón para que alzara la vista, dándose cuenta de que se encontraba llorando.

- No quiero... Por primera vez deseo no acatar una orden de papá... Nunca me gustó esta vida, los negocios sucios que tienen... Menos ahora que conocí a otro chico a parte de ti que me hace sentir amada, querida, respetada y me hace darme cuenta de mi valor... Un chico que no solo me miró por mi físico.

Su hermana ahora lloraba con ganas, cosa que lo hizo desmoronarse. La abrazaba con fuerza mientras la chica lloraba de manera desconsolada.

- Eres mi hermano, también te conozco y puedo decir que pasa lo mismo con Neteyam y tú.

Las palabras de la chica no tenían ni una sola pizca de duda, y Ao'nung sabía que no iba a servir de nada mentir.

- También tengo miedo.

Respondió mientras el rostro de la chica aún se encontraba en su pecho.

- Pero creo que saldría peor desobedecer a papá... De igual forma mandaría a alguien a hacer nuestro trabajo...

Tsireya sabía que su hermano tenía razón, pero le estaba doliendo demasiado justamente por eso.

- Por nuestro bien... Debemos de tratar de alejar nuestros sentimientos de ellos. ¿Lo entiendes hermanita?