You... (Aonunete)

╰─►10⸙͎ - ≡

Neteyam se despertó al sentir como era dejado sobre una superficie más blanda y al parecer lo tapaban con algo.

Sus ojos se abrieron demasiado tarde, ya que justo cuando intentó mirar quién había hecho aquello escuchó el ruido de la puerta cerrarse.

No era el mismo colchón viejo que había encontrado al principio, era mucho más cómodo... A decir verdad parecía nuevo y tenía una manta ligera y algo corta de color azul cielo, pero era bastante cálida.

Por supuesto que sabía de quién era, simplemente la hizo bola y la lanzó a una parte de la habitación, bajándose de aquel colchón y sentándose en el suelo.

- Prefiero esto a estar en algo tuyo.

Dijo al aire mientras cerraba sus ojos con molestia, para después mirar la bandeja de comida que habían dejado el día anterior. Realmente no tenía ganas de nada. ni siquiera de comer. Tan solo mirar aquella bandeja le estaba provocando náuseas, así que cerró los ojos.

Pronto Tonowari entró a la habitación.

- Buenos días.

Dijo y Neteyam lo fulminó con la mirada.

- Váyase a la mierda.

Contestó mientras seguía cruzado de brazos.

- Eres igual a tu madre.

Dijo él mientras ladeaba la cabeza.

- Ya saben que desapareciste debido a que tú nunca apagas tu celular, ni dejas de comunicarte con ellos. ¿no es así? Además mis informantes me dijeron que ya hay varias camionetas alrededor de la ciudad, asumo que están buscándote. Pero no te preocupes, les acabo de enviar una carta que les llegará muy pronto.

Sin decir nada más se retiró nuevamente de la habitación ante el silencio del Sully.

- Maldita sea...

Se dijo a sí mismo mientras se hacía bolita en donde estaba sentado, las lagrimas nuevamente caían por sus mejillas.

Ao'nung decidió apartar la vista de la pantalla.

Claramente tenían cámaras en aquel cuarto por seguridad.

El de rizos se fue del área de control hacia su recamara.

Así es, Neteyam estaba secuestrado en su propia casa, en uno de los cuartos en el nivel del sótano que tenían.

Su hermana entró a su cuarto lentamente.

- Hermanito... te traje algo de comer, no comiste nada desde que regresaron ayer...

- No tengo hambre.

Tsireya se acercó a el y lo abrazó.

- Lo'ak se enfadó conmigo... Claramente no le contesté si estabas en casa o algo de Neteyam... Me dijo cosas feas...

Su hermano mayor la abrazó, ambos estaban en un problema grande... Y tenían que salir de ahí.

- Tenemos que hacer algo...

La menor rápidamente lo miró.

- ¿Hablas en serio?

- Sí, muy en serio. A la mierda nuestro padre, esto es absurdo. Pasó hace mucho tiempo y... Simplemente no tiene sentido, ambos estamos vivos.

Dijo el Metkayina recordando el suceso que le había contado su padre.

La razón por la que ambas mafias se habían separado y declarado como enemigas.

- Tienes razón... Debemos pensar en algo.

- Creo que en cualquier idea, necesitaríamos burlar las cámaras de seguridad.