Parte 52

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"Háblame de tu vida."

Lisa se apoyó en un codo, mirando a Jennie. Su voz era gruesa, todavía afectada por su reciente actividad. Lisa sonrió con satisfacción cuando su mano rozó el pezón de Jennie.

"¿Quieres decir antes? ¿En Dallas?" Jennie asintió.

"Oh... ya sabes, solo cosas normales. Tuve un bonito apartamento. Trabajé para una de las firmas más grandes." Lisa sonrió. "No fue fácil conseguir un trabajo allí cuando lo hice. No tenía suficiente experiencia en ese momento, pero conocía a alguien que conocía a alguien y ya sabes", contó. "De todos modos, tenía un grupo de amigos de la universidad . Y un grupo de amigos del trabajo también". Ella se encogió de hombros. "Y salía, aquí y allá de vez en cuando. E igual pasé mucho tiempo aquí, en el río, durante las vacaciones, cumpleaños o cualquier otra ocasión que mi abuelo decidiera que el clan necesitaba reunirse. Y a veces venía sola por mi cuenta. Conducía  un viernes por la noche, pasaba el sábado en el agua, y parte del domingo, disfrutaba la comida de mi abuela ", dijo con una sonrisa mientras pasaba su mano por la cintura de Jennie. "¿Qué hay de ti? ¿Cómo era tu vida antes?"

Jennie suspiró. "Es difícil para mí incluso recordar los primeros días. Parecía que Mingyu estuvo enfermo durante tanto tiempo, cuando pienso en el pasado, es lo que más recuerdo y es muy triste. Teníamos un grupo de amigos con los que salíamos... también solíamos hacer barbacoas en el patio y reuniones los domingos para los partidos de fútbol. Algunos eran amigos de Mingyu y otros eran míos y, con el tiempo, todos nos mezclamos. Una vez que Minho llegó a nuestras vidas, bueno, te dije que fuimos los primeros en tener un hijo, así que eso cambió un poco las cosas ". Se puso de espaldas a Lisa. "Pasamos mucho tiempo con mis padres. Tienen una casa grande y una piscina, así que ese fue el lugar de reunión cada verano." Jennie volvió la cabeza para mirarla. "Cosas normales".

Lisa sonrió. "Supongo que nunca imaginaste algo como esto".

"Dios, no".  Ella se encontró con su mirada. "Sin embargo, a veces, cuando estoy contigo, no puedo imaginar que esto no sea mi vida". Jennie se giró de nuevo a su lado, para estar frente a ella. "Me siento tan cómoda contigo... así. Me siento natural." Hizo una pausa. "Yo amaba a mi marido. Tuvimos un buen matrimonio. No hubo peleas, no hubo grandes desacuerdos, fuimos compatibles. Y cuando se enfermó, cómo te dije, todo cambió. No puedo culparlo, por supuesto, pero se convirtió en alguien que ni siquiera conocía. Los últimos seis meses más o menos, él era... era tan diferente al hombre con el que me casé. Fue muy difícil pasar por eso, verlo cambiar así ante mis ojos. Y sé que él no pudo evitarlo".  Hizo una pausa. "El último par de meses, el último mes para ser más específica, él estaba sufriendo tanto, que... estábamos esperando ya el final, de verdad. Y Minho... pobre Minho, no creo que él realmente supiera, o entendiera, todo lo que pasaba. Fue un... fue... y me da vergüenza incluso decir esto, pero fue..."

"¿Un alivio?"

"Sí. Lo fue. Creo que te lo dije antes... pero me sentí aliviada cuando todo terminó. Me siento muy mal por decirlo. Pero él estaba con mucho dolor. Siempre escuchas a la gente decir algo como 'bueno, al menos su dolor se ha detenido.' Sí. Todo el dolor se había detenido, pero me sentí egoísta cuando todo acabó porque más que nada me sentía aliviada. Entonces... bueno, después me sentí con... "

"¿Qué? ¿Con culpa?"

Jennie asintió. "Entonces me sentí culpable, y es por eso que terminamos aquí. Pero traté de dejar todo eso atrás. El cambio fue bueno, en realidad era necesario." Jennie la tomó de la mano. "Conocerte... eso fue lo mejor que me pudo haber pasado tanto a mí como a Minho".

"¿Y esto?", preguntó en voz baja mientras tocaba el pezón de Jennie con el dedo.

Jennie se inclinó más cerca, lamiéndose  los labios. "No puedo imaginar que no tengamos esto, ¿tú puedes?"

"No."

"Lisa... estoy enamorada de ti. No pensé que me volvería a enamorar de nadie en realidad y... ciertamente no de una mujer. Pero cuando estoy contigo, ya sea que estemos jugando en el río o cenando... o haciendo el amor, todo, se siente bien si es contigo".

Lisa estaba inmóvil mientras Jennie se acercaba, poniendo sus cuerpos juntos. Sí, Jennie estaba enamorada de ella. Ella estaba enamorada de Jennie. ¿Ahora que?

Jennie la besó suavemente. "Sé lo que estás pensando", le susurró.

"¿Lo sabes?"

"Va a estar bien, Lisa".

Lisa la apretó contra ella. "Yo espero que sí. Porque estoy locamente enamorada de ti ".

Un estanque en secreto - [Jenlisa adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora