Romance Secreto

Dulce Tentación

Vivir con ellas era complicado, vivir con dos bellezas de las que uno puede enamorarse fácilmente.
Minji era bastante amable, cariñosa, dulce, una mujer que con solo una mirada era capaz de provocar suspiros, era de esas mujeres en las que se desea abrazar y besar a cada momento.

Los días pasaban y traté de evitarlas lo más que podía, gracias a mi nuevo trabajo, en esa ciudad podía por algunos momentos lograr eso, y es que era necesario ya que no podía negar que eran una tentación, eran mis hermanas y no era correcto pero me enamoraban. En una mañana cuando yo estaba de salida ví a Minji con unos shorts cortos, y la verdad uff, tenía unas preciosas piernas, unas en las que era capas de disfrutarlas sin parar, aquella mañana ella me había provocado una erección, y consideré querer conquistarla, quería enamorarla, tener algo con ella, el solo imaginar que ella aceptase daria paso a momentos intensos con ella, pero no, debía contenerme, no debía conquistarla, no era correcto, sin embargo el haber pasado tanto tiempo lejos de ellas, hacía complicado todo. Aquella mañana observé sus labios, su figura, su cabello ondulado suelto, en verdad esa mañana en mis pensamientos quería olvidarme de todo, no ir al trabajo y abrazar a Minji, decirle cosas lindas e ir a la habitación para pasar un momento juntos, suspiré, y decidí dejar llevarme por la situación, decidí aplicar mis métodos de conquista con Minji, si fracasaba sería algo bastante bueno ya que cerraría definitivamente esa tentación con ella, asi que sin más la observé fijamente a los ojos, ella también lo hacía, sonrió un poco y me dijo que si pasaba algo, entonces le contesté, que no pasaba nada, que solamente admiraba sus preciosos ojos, que admiraba su belleza radiante esa mañana. En ese momento esperaba que ella se molestara o algo, pero lo que hizo fue sonreír, y respondió con un gracias, luego ella se dirigió a su habitación, pero antes de entrar me miró fijamente y dijo "Es extraño, pero tus palabras acaban de alegrarme el día." y una vez dicho eso entró a su habitación.
En ese momento confirmé que yo ya no tenía salida, estaba decidido a conquistar a Minji.