Capítulo XXII

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⚠️🔞 Contenido sensible 🔞⚠️




- Me portaré bien, lo prometo, pero no me hagas daño - le suplicó con una mirada de niña buena, sabiendo que eso le provocaría aún más.

Con sólo un movimiento la liberó, la cargó hasta la cama recostandola en ella para nuevamente esposar sus muñecas al cabecero de la cama, en ese momento pensó en salir de ahí. Su cabeza repetía la palabra "huir" cientos de veces por minuto, pero su cuerpo respondía de manera diferente.

Una vez esposada, Lisa comenzó a besarle el cuello, besos húmedos dejaba por su piel mientras bajaba lentamente hasta sus pechos, viajando hacia su ombligo. Jisoo bajó la mirada y se encontró con una escena totalmente erotica, la miraba con deseo y tras sonreir lo único que provocó fue aún más calor del que ya tenía.

La castaña se recriminó internamente, no podía terminar de entender cómo era que su cuerpo reaccionaba involuntariamente ante el deseo de Lisa, no después de todo lo que había visto, las imágenes de ella lastimando sus zonas íntimas eran para perder el juicio pero no del modo en que lo estaba haciendo, tenía que odiarla, sentir repudio por ella y en un arrebato hasta sentir asco por ella, sin embargo no era así, no podía dejar de quererle como lo hacía y sabía perfectamente que estaba perdida, no había salida y aunque si la hubiera sencillamente no quería irse.

Cuando prácticamente la tenía suplicando para que no parase de tocar su cuerpo se alejó, se dirigió a una de esas estanterías que tanto respeto le daban y se acercó a ella con algo en la mano, más bien con varias cosas de las cuales solo pudo distinguir un antifaz.

- Pretendes vendarme los ojos? - su voz temblaba aunque no reconocía si era de miedo o de excitacion.

- Te vendare los ojos y si sigues hablando te taparé nuevamente esa boquita tuya aunque me gustaría oír tus súplicas para que te folle - su respuesta de superioridad provocaron en ella una mezcla de odio y excitación. Odiaba eso, el poder que tenia Lisa para colocarla en un punto de medio de querer y no querer al mismo tiempo, de desear tanto algo que al mismo tiempo anhelaba qué no fuese así.

Teniendo en cuenta que estaba de vuelta a su merced y a su completa disposición, atada y sin poder moverse prefirió guardar silencio y quedarse callada esperando el siguiente paso que daría con ella, era tan impredecible y su miedo era evidente, el nerviosismo emanaba por cada poro de su cuerpo.

Lisa se puso encima de ella apretándola contra su erección, aumentando así su deseo, dejando el resto de los artefactos a lado de su cabeza pero antes de que pudiera mirar si quiera lo que eran, su visión se nubló, le había vendado los ojos por lo que asumió que ahí empezaba el juego otra vez, siguió besándola, torturándola con sus caricias por todo el cuerpo, ni siquiera sabía dónde estaban sus manos pues se movían al rededor de toda su anatomía, después de seguir así por un buen rato se separó de ella, le abrió las piernas y sintió como las ataba, dejándola completamente abierta para ella.

- Tengo una vista maravillosa desde aquí - dijo la pelinegra y ahí notó qué estaba entre sus piernas, cerca, muy cerca de su centro tanto que podía sentir su respiración sobre su entrada.

De repente se escuchó el ruido de un bote abriéndose para esparcir su contenido en su vagina, dejándolo aún más mojado de lo que ya estaba, su respiración se volvió entrecortada, no pasaron ni dos minutos cuando ese líquido comenzó a hacer efecto, Lisa no necesitaba usar ningún tipo de lubricante para excitar a sus presas sin embargo esa noche debía hacerle entender a Jisoo la lección, utilizando un lubricante con un tipo de contenido distinto porque empezó a sentir mucho calor ahí abajo.

Insane (Lisa GIP) Where stories live. Discover now