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Es sábado, Louis estaba en su casa, cuando escuchó el timbre. "¿Quién será?" se preguntó.
Su madre le dijo que abriera la puerta mientras ella sacaba unas cosas del horno.

Al abrir se encontró con la mirada ojiverde. Le dió una mala cara, cuando escuchó —Hola, enano. Mi madre llegará pronto—El rizado estaba parado en la puerta y los dos se veían.—Gracias por dejarme pasar.— Menciona con sarcasmo, antes de entrar.
Louis lo mira mal y murmura sonrojado un —No lo hice—Mientras llegaron recuerdos a su mente de lo que hizo ayer en la ducha. "Cálmate" se regaña mentalmente.

La madre de Louis, trae una bandeja con brownies. Saluda a Harry emocionada mientras le brinda uno.

—Están muy deliciosos. Señora, Johanna.— Halaga Harry, realmente estaban muy ricos. Louis escucha y se siente halagado, pero no dirá que él fue el que los hizo.

—¿Verdad? Los hizo Lou.—  Revela con alegría para irse a la cocina. Harry dirige su mirada a él chico y se acerca demasiado, encorbandose un poco para llegar al oído del más bajo, para decirle casi en un susurro —No sabía que cocinabas, están deliciosos, de verdad.— Louis siente escalosfrios en su nuca, se aparta viéndolo mal y se queda viendo su móvil.

A los pocos minutos, timbra Anne, pero Johanna abre la puerta. Se saludan y tienen un mirada rara.

Al parecer el único que no sabe lo qué pasa es Louis.

—Hijo, que tal si con Harry traen las bandejas de la mesa en la cocina.— Louis iba a negarse cuando sale un —No es pregunta, Louis.— Él rueda los ojos y se levanta, con Harry detrás de él.

"Algo está pasando aquí" piensa el menor.

En la cocina él pregunta, con su cabeza un poco alzada para ver a Harry—¿Qué haces aquí?— Harry se acerca peligrosamente y coloca una mano en el mentón del más bajo respondiendo —Realmente no lo sé, Louis.— Y la voz de Harry siempre provoca espasmos en él.

Y Harry lo sabe, su ego no se siente tan herido por éso, por lo que ama hablarle profundamente porque sabe que lo intimida. No es un secreto para nadie que Louis es gay, pues él es muy abierto con éso.

Louis chilla y lo aparta. Luego toma dos bandejas, una en cada mano y le indica a Harry con la boca señalando que agarre las otras dos bandejas.

Y Harry, quiso tanto besarlo.
"Me volverá loco" pensó antes de tomar las bandejas y salir.

Los cuatro están en la mesa de comedor, las madres hablan de sus cosas, mientras que Louis intenta ignorar a Harry, que lo mira cada cierto tiempo.

Las madres aman el vino, así que hay una botella en la mesa y copas. A Louis realmente no le gusta tanto, pero siente tanta tensión que cuando se da cuenta ya lleva tres copas, y puede que éste un poquito ido, pero lo suficientemente consciente aún.

Ambos van a tomar un salero de la mesa, sus manos chocan haciendo que sientan cosquillas. Louis quita su mano primero y piensa que ya no quiere sal.

Harry sonríe para sus adentros, sabe que descoloca a Louis. Y no puede esperar para besarlo y hacerle de todo.

Ambos piensan en sus cosas, cuando las madres se miran raro, "como siempre" piensa Louis, cuando una de ellas dice —Nos faltan ingredientes para un postre nuevo que haremos.— Louis rueda los ojos, ya sabe por dónde va la conversación.

—¿Qué tal si tu madre y yo salimos a comprar mientras ustedes conversan?— ¡Ajá! Ahí ésta. Las dos madres siguen encaprichadas con juntarlos.

Harry levanta sus hombros y a Louis no le queda de otra que asentir. Ambos escuchan la puerta cerrarse.

Harry, que está sentado al lado de Louis. Se acerca más a él para susurrarle cerca un —¿Te gusta la comida?—Y Louis sabe que dentro de ésa pregunta, hay una doble intención, o tal vez es sólo una mala pasada de su mente un poco ida por el vino. Decide ignorar a Harry y seguir comiendo.

El silencio es absoluto, ambos quieren hacer algo, pero ninguno es capaz.

Ellos se odian, según Louis odia a Harry, pero pensar en sus largos dedos dentro de él y en su voz profunda diciendole cosas sexuales, lo descoloca. Y Harry odia lo terco que es el menor e igualmente su arrogancia, pero piensa en cómo sería tocar el bonito culo mientras lo besa y se inserta en él.

La tensión es mucha, los dos tal vez no están pensando con claridad, sintiendo unas leves erecciones crecer. Harry es muy perceptivo y siente el ambiente demasiado exitante.
No sabe lo que ésta haciendo, se arriesga a una posible cachetada cuando se acerca más al chico a su lado, toma su rostro y besa sus labios tan fuerte que jadearon ambos.

Siente el leve sabor a vino en los labios del menor y sus labios son tan suaves, como se sentirían chupando su... Harry intenta alejar ésos pensamientos.

Empiezan a mover sus labios, Louis piensa que sólo será por está vez y puede echarle la culpa a una supuesta cabeza borracha después, así que se deja llevar por el rizado. Y Harry besa tan bien, insertando su lengua, chupando y mordiendo sus labios, es demasiado dominante. Siente una mano fría entrando un poco debajo de su camisa. Louis se eriza, no puede con tanto, se siente tan abrumado, quiere que el mayor lo tome, lo suba a la mesa y... Ahora los dos están tratando de alejar ciertos pensamientos.

Se están besando ruidosamente, sonidos húmedos salen de sus bocas y suspiros. Louis enreda un poco sus dedos en el cabello de Harry, estirando un rizo.

El rizado sonríe en el beso, mientras se pega aún más a Louis, sus pechos se tocan.

Mierda piensan ambos cuando escuchan el timbre seguido de un —Hijo, olvidé las llaves.— Louis reacciona, se aparta para levantarse rápido. Respira profundo antes de abrir la puerta.
Entran las dos madres con unas bolsas de compra, preguntan—¿La comida estaba rica?— Y no saben si sus mentes les juegan una mala pasada, pero los dos piensan estuvo deliciosa.

El menor agredece tener un buzo largo que tapa su erección, el mayor aún está sentado por lo que su erección está oculta por la mesa de comedor. Vuelven a quedar lado a lado y ninguno puede dejar de pensar en el otro.

"¿Qué mierda hicimos?" Ésta pensando Louis. —¿Hijo, estás bien?—Menciona la madre al notar a su hijo raro y él quiere morirse de la vergüenza. No puede creer que se besaron.

"Fue culpa del vino" se repite así mismo una y otra vez, aunque una parte de él sabe que no es así, que él sí deseaba besar a Harry, quién ésta en silencio pensando cosas desagradables para bajar su erección.

Se quedan los hijos en silencio el resto de la comida, mientras las madres hablan, hasta que Harry y Anne se van.

Louis ya ésta en su cuarto, piensa "Lo odio, lo odio, lo odio" una y otra vez. Es tan rencoroso por lo que Harry le ha hecho antes y ésta seguro, que como siempre, el lunes terminará haciendole algo que lo hará odiarlo aún más.

Love or Hate. LSWhere stories live. Discover now