NARRA ZOE:
Greg: ¡Cooper!—Grita alguien.
Me doy la vuelta encontrándome con Greg caminando hacia mi echo furia, traía su short de baño y tenía puesta una camiseta.
Greg: ¿¡Por qué cojones has cogido mi camiseta!?
Zoe: Solo es una camiseta relájate Greg.
¡Mala idea, mala idea! Corrió hacia mi y me tomó por el cuerpo empujándome a la piscina cayendo los dos en esta, cuando caí a el agua busque el suelo para impulsarme hacia arriba, cuando hice eso intenté buscarlo de nuevo pero me di cuenta que no llegaba a tocarlo. Me aferre a el cuerpo de Greg enrollando mis piernas al rededor de sus caderas mientras tosía.
Greg: ¿No sabes nadar?—Preguntó pasando su mano por mi cintura agarrándome mejor.
Negue con la cabeza y el soltó una carcajada para nada amigable pero se escucho sexy. ¡PERO QUE COÑO ESTAS DICIENDO ZOE!
Greg: ¿Y tampoco tocas el suelo verdad?—Se burló.
Zoe: Deja de burlarte idiota puedo nadar cuando quiera. —Gruñí.
Greg: Entonces puedes sola.—Quita sus manos de mi cintura dejándome caer.
Zoe: ¡No, no me sueltes!—Me aferre a su cuello y apreté mi agarre en sus caderas con mi piernas.
Coloco una mano en mi trasero y la otra en mi espalda pegándome más a el, la tela de su short se pegaba a el lo que hacia que su miembro chocará contra mi entrepierna con facilidad.
Comenzó a caminar a las escaleras de la piscina ya que le si tocaba el suelo, claro no me extraña con lo alto que es. ¡QUÉ SUERTE TIENE EL MUY IDIOTA! Cuando salimos todas las miradas cayeron en mi, la camiseta que estaba mojada se pego a mi cuerpo haciendo que se vea mi traje de baño. Al salir yo estaba muy confundida intente bajarme pero el me lo impidió apretando más mi trasero.
Zoe: ¿A dónde vamos?
Greg: A la cabaña, tenemos algo pendiente.
NARRA GREG:
Una vez dentro de la cabaña la lance a la cama haciéndola soltar un quejido, le coloque el seguro a la puerta y camine de nuevo a la cama. La camiseta que traía se adhería a su cuerpo dejándome ver el traje de baño que lleva de bajo. Pongo mis manos en la camiseta y se la saco por arriba.
Greg: Está, es mía—Tomo la camiseta y la lanzo por la habitación.
Ella se incorpora en la cama sentándose sobre sus piernas algo incomoda y nerviosa, bajo la mirada a sus tetas y se ven tan ajustadas ahí dentro.
Greg: Ponte aquí—Señalo el borde de la cama.
Me mira desconfiada y después se arrastra hasta el borde de la cama quedando en la misma postura, sentada sobre sus piernas. Paso mi dedo por su pálido rostro con unas gotas de agua, paso mi mano por su pelo de color negro como el carbón que está totalmente mojado, noto lo tensa que está ante mi contacto.
Greg: ¿Sabes hacer una mamada?—Pregunto tomando su barbilla entre mis manos alzando su cabeza para que me mire, sus mejillas se tornaron color rosa y negó con la cabeza.— El idiota de mi hermano no te ha enseñado a hacerla?— Volvió a negar.— ¿Quieres intentarlo ahora?—Pregunto acariciando su pelo.
Me mira desconcertada y aún más sonrojada, pero a pesar de eso asintió con la cabeza con lentitud. Sa que mi polla del short sin bajarlo del todo, al sacarlo estaba semirrecto, lo tomé con mi mano y empecé a mover mi mano de arriba abajo todo esto bajo su mirada.
Greg: Pídelo—Ordené.
Zoe: C-como?—Su voz tembló.
Greg: Di que quieres probar mi polla.
Se tomo unos segundos mirando mi polla, como si estuviera pensando, alzo la vista para mirarme de nuevo con sus mejillas aún rojas.
Zoe: Quiero probar, tu polla—Hablo entre jadeos.
Tome mi polla y la metí a su boca de una sola estocada haciendo que se atragante.
Greg: Chúpala como si te estuvieras comiendo una piruleta, el resto puedes tomarlo con tus manos—Dije al ver que su mirada estaba en mi polla dura.
Ella solo asintió, llevó sus suaves y delicadas manos a mi polla, jadeé al sentir sus manos, sus labios carnosos y finos comenzaron a moverse en mi polla lentamente mientras que sus manos se movían intentando mantener la coordinación. Pronto sentí su lengua alrededor de este trazando círculos por el tronco, sacó mi polla de su boca dejando una línea de saliva con fluidos caer por su boca.
Llevó su boca a mi glande pasándola mientras hacía círculos y sus manos seguían moviéndose. Sonreí al ver tal imagen. Volvió a meterlo a su boca pero esta vez la cogí del pelo para comenzar a penetrar y embestir, pronto sentí mi glande tocar su garganta, por sus ojos salían lágrimas pero no dejaba de mover su lengua sobre mi tronco.
Di una embestida fuerte metiéndola toda a su boca haciendo que su cara choque con mi abdomen, al sentir que estaba cerca de él orgasmo saque mi polla de su boca. A lo que ella me miro confundida.
Greg: Quiero estar dentro de ti ya—Camine al cajón de la mesilla y saque un condón negro de este, me acerque de nuevo a la cama y abrí el condón, cuando estaba por ponerme lo vi que Zoe no quitaba su mirada de mí.— ¿Quieres ponerme lo?—Pregunte extendiendo el condón, lo tomó con sus manos, lo coloco en la punta para después deslizarlo por el resto de mi polla.
Desesperado la tome entre mis brazos acostando la en la cama, lleve mis manos a el elástico de su traje de baño y lo baje de un solo tirón lo tire por el suelo, baje mi short para también tirarlo. Me puse encima de de ella, abrí sus piernas dejándome ver su coño, puse mi polla sobre su vagina y comencé a golpear su clítoris con mi polla.
Posicione mi polla en su entrada y comencé a meter la punta oí como jadeo, me acerque a ella y le quité la parte de arriba del bikini dejándome ver sus tetas, sus pezones están duros, acerco mi boca a ellos para comenzar a morderlos y chuparlos mientras introducía mi polla en ella, bese su cuello para evitar que se concentrada en el dolor.
Cuando estuve dentro de ella aprecie la sensación caliente y como sus paredes apretaban mi polla, quería romperla ahora mismo, pero tenía que contenerme era su primera vez (ya que mi hermano y ella todavía no han llegado a estos niveles), la mire a la cara y vi como unas lágrimas brotaban de sus ojos.
Greg: Voy a comenzar a moverme ¿esta bien?—La mire y ella asintió, levante mis caderas sacando la mitad de mi polla para después penetrarla dando una embestida leve, jadeo al sentir lo apretada que esta en cambio ella soltó un gemido de dolor.
Pase mi manos por todo su cuerpo acariciando acerque mi boca a la suya, sus labios eran suaves y carnosos, mientras la besaba di otra embestida.
Greg: ¿Todavía te duele?—Pregunte viéndola.
Zoe: Arde un poco—Respondió en una mueca, lleve mi mano a su clítoris para comenzar a frotarlo mientras embestía sin tanta fuerza, estar dentro de ella se sentía tan jodidamente bien.
Cuando sus gemidos comenzaron a aumentar y sus caderas a levantarse en busca de más contacto supe que lo estaba disfrutando, pongo sus piernas en mis caderas para que las enrolle, junto nuestras frentes y comienzo a embestir rápidamente el sonido que hacen nuestro cuerpos chocando es simplemente exquisito y sus gemidos hacen que vaya cada vez más rápido.
Me levanto de la cama y cojo sus piernas atrayendo la hasta la orilla de la cama para volver a penetrarla, mis manos toman su pequeña cintura para comenzar a moverla con más fuerza, observe como sus tetas se movían de arriba abajo mientras gemía. Nuestro orgasmo estaba cerca, sus paredes me apretaban con más dedicación y mi polla entraba cada vez más al fondo, sentí como sus fluidos cubrieron toda mi polla y como los míos salían llenando el condón.
Zoe: ¡Greg!—Gimió cuando llegó.
Me recosté sobre su pecho regularizando mi respiración, sin duda este ha sido uno de los mejores polvos que he tenido.
