La Quinta Shelby: Secretos y Mentiras

El Fin De La Boda.

NARRADOR OMNISCIENTE.

Luego del vals de los novios, la pista de baile se abrió y la música clásica inundó todo el salón con piezas conocidas y vals tradicionales, haciendo que tanto jóvenes como adultos participaran.

-¿Emily? –La castaña escuchó su nombre y se quedó pálida al ver de quién era la voz.

-¿Cho? ¿Qué haces aquí?

-Daphne me invitó, llegué tarde por la distancia, ¿Qué haces tú aquí? ¿Y de dónde sacaste ese vestido?

Emily estaba muy nerviosa, toda la boda se había cuidado de mantener un perfil bajo para que su familia no la descubriera, pero con la presencia de Cho, se sentía expuesta.

-Yo...

-Por fin te encuentro –Se acercó Theo y pasó su brazo por la cintura de Emily.

-¿Qué es esto? –Preguntó nuevamente Cho.

-Eres Cho Chang ¿Cierto? –Preguntó el castaño.

-En realidad Diggory.

-¿Diggory? ¿Ahora eres familia de mi asistente?

-¿Cómo dices?

-Sí, Emily trabaja para el grupo Nott, o sea mi familia y por ahora es mi asistente.

-¿Por qué trajiste a tu asistente?

-No creo que deba darte explicaciones a ti, pero yo no tengo una pareja estable, por norma los solteros debemos venir acompañados, por eso la traje, además necesito que comience a relacionarse con la alta sociedad.

-Ya veo.

-Cho, es hora –Le informaron otras chicas.

-Nos vemos luego.

Emily suspiró y Theo rio un poco.

-Gracias por eso.

-No hay de qué.

-¿De dónde sacaste lo de que soy tu asistente?

-Verás Emily, cuando vas a mentir a largo plazo debes tener un plan, por eso Tom me mandó a tu rescate –Explicó y regresó con sus amigos.

La pequeña Diggory buscó con la mirada a Tom y lo encontró hablando con algunas personas, ella era consciente de que no estaba al nivel de él, pero no podía evitar emocionarse ante los actos que él solía tener con ella.

Sacudió un poco la cabeza y luego fue a buscar a sus amigas, faltaba poco para la sorpresa de la novia y tenían que cambiarse.

-Jamás ensayamos todas juntas, ¿Y si nos equivocamos? –Decía lavender mientras las doncellas la despojaban de su vestido y sus amigas rieron.

-Cálmate, Daphne repasó la alineación con todas, estaremos bien –Siguió Lilith.

De grandes vestidos pasaron a unos más cortos y todos del mismo color, así mismo, dejaron los tacones de lado y los cambiaron por zapatillas deportivas.

Las cuatro salieron de la habitación de Lilith y mientras caminaban Luna se quedó atrás al ver a Melanie y Azael riendo.

-Oh vamos, ¿Recuerdas que yo te ayudaba a practicar? –Comentó Azael.

-Y eras pésimo –Respondió su ex y ambos rieron.

-Moony –La llamaron y ambos la vieron.

La rubia se apresuró a alcanzar a sus amigas y Azael no pudo evitar sonreír de ternura.

-¿Aún son amigos? –Le preguntó su ex.

-La verdad no tengo idea.

-Azael.