Enseñame

Capitulo 2

—Ese pijama, es muy probador— Susurra Christopher en el oído de Dulce.

Dulce siente que su pulso se acelera, Christopher la mira intensamente, ella no ssbe que decir, este acercamiento le toma por sorpresa, él se acerca lentamente viendo que Dulce no dice nada, roza sus labios con la de ella, desde que la vio hace exactamente siete meses, es la culpable de sus sueños más eroticos por eso se mantuvo lejos pero ahora tenerla tan cerca, para su sorpresa Dulce corresponde al beso, rodea su cuello con sus brazos y el la trae más hacia su torso desnudo.

Sube a Dulce y ella rodea su cintura con sus piernas, el beso es caliente y hambriento sus lenguas juegan quemando cada rincón de sus cuerpos, Dulce al sentir la cama bajo suyo reacciona y aparte a Christopher que le mira también apartartandose.

—Christopher lo siento yo no— Pero él la interrumpe.

—Ésto no volverá a pasar Dulce— Dice secamente saliendo de la habitación de ella y cerrando la puerta detrás de él

Dulce suspira, recuperando su cordura, y maldice a si misma, estuvo a punto de acostarse con Christopher y su mente viaja al pasado.

—Chris estás borracho tonto —Exclama Dulce sonríendo, poniendose roja por la forma en que Christopher la miraba, el se acerca ella la mira fijamente y la besa, Dulce le empieza besando torpemente, estaba muy nerviosa. Chris su Chris el mejor amigo de su hermano, del que estaba enamorada la estaba besando. Ella le corresponde el beso, sus besos le daban uja sensación de calor en el estómago y bajaba hasta su entrepierna, siente las manos de Chris debajo de su casita, estaba decidida a perder su virginidad con él. Entre besos caen sobre la cama, Christopher rompe el beso ambos se miran, Christopher esperaba su aprobación, Dulce sonríe.

—¿Dulce eres virgen? —Pregunta Christopher, Dulce apenada se tapa la cara, Christopher le saca la mano —No merezco ésto, hacerte mia solo porque me traes— Exclama Christopher, levantandose.

—Chris, estoy seguro yo te quiero— Exclama Dulce con ganas de llorar y sintiendo vergüenza.

Christopher la mira serio y sale de la habitación. Dulce se siente poca cosa, nadie en realidad y se pone a llorar, se queda varias horas sentads en el suelo, hasta su estómago la obliga a despegarse del suelo y salir en busca de comida era la hora de la cena, todos estarían en el salón, asi que se apresura en ir al comedor, se queda queda quieta al oir voces eran Christopher y Alan.

—¿Así que te acostaste con Dulce? —Pregunta Alan. Dulce se tapa la boca, y lo que Christopher dice le rompe en mil pedazos.

—No, es una niña tonta que idealiza sueños rosas— Exclama y ambos van hacia el salón. Dulce por el contrario vuelve a su habitación, llorando sin poder parar. Envia un mensaje a su mamá diciéndole que se siente mal y si no podían venir por ella.

Dulce se durmió un profesor la fue a despertar, la vio realmente mal tenía los ojos rojos.
—¿Dulce que tienes? —Pregunta el Profesor.

—Me duele mucho el estómago, creo noe. Cayo bien oa merienda— Exclama Dulce mintiendo era la única forma de que la envíen en casa y dado su estado de tristeza y la cara roja de llorar ayudaría.

—Bien ya están enviando por ti. Prepara tus cosas Dulce, ya enviaré por tu equipaje. — Exclama tiernamente el profesor. Dulce asiente con la cabeza luego de diez minutos ya estaba en la entrada esperando por sus padres, que iban a recogerla.

—¿Dulce te vas, estas bien? — Pregunta Christopher acercándose a ella, le toca el brazo pero ella se aleja de él.

—Si está niña tonta que idealiza sueños rosas esta bien— Exclama Dulce en eso se oye la voz de su madre, Christopher se sienta mal no pensó que ella lo había escuchado.