Proyecto ¿Romeo y Julieta? ﻌ [Hyunlix] ☑

Acto 5

Tenían toda la semana con esa rutina, ensayaban dos horas, iban a clase juntos actuando como el otro y se iban a casa por separado.

Félix a veces lo ignoraba, pero había ocasiones en que la mirada de Hyunjin lo perseguía hasta para salir del aula y cuando recreaba el personaje del otro, había algo que Hyunjin se buscaba, un insulto del menor, por lo bajo, jamás se le decía dentro de la institución.

Hyunjin por otro lado, a veces sentía ligeras miradas del menor, no eran tan intensas como cuando conectaban sus miradas, y seguía tratando de descifrar tal enigma, entender las emociones de ese pequeño, era su meta principal.

Era sábado y se preparaban para el último ensayo del día. Ambos estuvieron en posición y esperaron el llamado.

—Acción —gritó Dongwook en uno de los asientos del público, teniendo a su hijo de un lado y a la amiga de Félix del otro.
  
  
 
 

(Evaristo corre hacia Aryon)

EVARISTO.-(Tratando de recuperar el aire) ¿Eres leñador?

ARYON.- ¿Por qué vienes con tanta prisa? ¿A ocurrido algo?

EVARISTO.- Te pido que por favor respondas a mi pregunta, hoy te he visto con la familia que la mía no soporta, con la que lleva años, generaciones peleando por este bosque y sus criaturas, por favor, dime que tú nombre no es Aryon.

ARYON.-(Sorprendido, se acerca) ¿Entonces tú nombre es Evaristo?

(Ambos se miran sorprendidos)

EVARISTO.- No puedo creer que el único amor que he hecho en mi vida sea el hijo de la familia que tanto detestamos, no me creo que el destino sea así de cruel. Los dioses me han enviado algo peor a un castigo. Amar a mi enemigo.

ARYON.- El destino nos ha maldecido, pero no...

 
  
 
 
Hyunjin se queda en silencio, olvidando lo que continuaba.

—¿Hyunjin? —Dongwook se levanta de su asiento—, ¿olvidaste tú parte?

—Lo lamento —se inclinó avergonzado hacia su profesor.

—No te preocupes, es normal —mira a su hijo y este se levanta, seguido por la joven—, ustedes sigan ensayando un poco más, los veo el lunes.

—Tenga un buen día, profesor.

Hyunjin y Félix se inclinaron y hablaron al unísono. Estuvieron así unos segundos y volvieron a su posición inicial.

—Lee el guión—dijo el menor caminado al extremo del escenario, donde estaban sus pertenencias—, ensayamos esa parte y nos vamos.

—¿Qué seguía? —Hyunjin se acercó y tomó el guión que estaba sobre su mochila.

—Aryon le dice a Evaristo que el destino les maldijo, que no importa lo que los dioses dijeran, amaría... Es la escena de confesión.

—Por eso lo olvide —susurro.

Félix lo miró curioso, no esperaba que Hyunjin olvidará algo, mucho menos que confirmará olvidarlo. Ese chico era un dilema, algo que no comprendía ni por actuar como él ni junto a él, no importaba que hiciera, parecía entenderlo menos conforme pasaba el tiempo.

—Dejemos el diálogo para después —habló el mayor—, necesito practicar los movimientos.

Félix leyó el libreto.
 
 

(Aryon toma la mano de Evaristo y lo acerca)
 
 

Los ojos del menor se abrieron como platos, había olvidado eso.