el milagro el reencuentro

Parte sin título 27

Distraído en sus pensamientos, Alfonso regresó al hotel. Apenas entró, vio a Anahí con Manu. El niño, que estaba casi dormido, se despertó cuando vio a Poncho abriendo la puerta.

- ¡Tío Poncho! Sonrió.

Anahí también le sonrió y Poncho tuvo un buen presentimiento. A pesar de todos los malos pensamientos que le venían a la cabeza relacionados con la culpa, se dio cuenta de que estaba en el lugar correcto. Allí, frente a él, había una mujer a la que amaba y un niño que, aunque no era su hijo de sangre, Poncho ya podía ver que había un amor recíproco entre ellos.

- ¡Hola amor! - dijo Anahí. - ¿Está todo bien?

-Es... ¡Es!

Poncho se acercó a ellos, le dio un beso a Manu, un beso a Anahí y le acarició la barriga para saludar a Emiliano.

- ¿Has visto a Diana? —preguntó Anahí.

-No. Hablé con su madre. Está muy decepcionada de mí, no quería escucharme demasiado y dijo que no necesitaban ninguna ayuda de mi parte.

—Sí —suspiró Anahí—. - ¡Las madres siempre soportarán los dolores de sus hijos! ¡Entiendo!

- ¡Estoy preocupado porque quería ayudar de alguna manera! —dijo Poncho mirando a la pared—.

Esa mirada asustó a Anahí. Sabía que Poncho estaba preocupado por Diana y tenía miedo de la actitud que tendría ante todo lo que estaba pasando.

No quería hablar de eso delante de mi hijo. Besó a Manu en la cabeza y miró a Poncho.

"Voy a acostar a Manu y luego me voy a ir a la habitación para que podamos hablar".

-¡De acuerdo! - dijo. - Voy a darme una ducha para refrescarme la cabeza. - le dio un beso en la frente a Manu que sonrió. - ¡Buenas noches, que tengas dulces sueños!

- ¡Buenas noches, tío Poncho!

Le dio un besito a Anahí y fue al baño a ducharse. Ver a Poncho caminando con la cabeza gacha de esa manera hizo que Anahí se angustiara.

Le leyó un cuento a su hijo, pero su mente estaba en su relación. Temía que su preocupación la llevara a la reflexión de que debía volver con su ex.

Cuando el hijo se durmió, se fue a su habitación y Poncho estaba acostado en la cama.

Anahí se acostó a su lado y le dio un beso en la mejilla. - ¿Qué pasa por tu cabeza? ¡Puedes decirme, lo que sea!

Envolvió su brazo detrás de ella y la acercó a su cuerpo.

"Estoy conmocionado por lo que le está pasando a Diana. Siento que es mi culpa que ella se haya quedado en ese estado. Sé que cometí un error. La separación fue muy repentina y por todo lo que estaba pasando, se sintió engañada.

- No tienes que cargar con esa culpa. Nos conmovió la emoción. Y de eso es de lo que hablábamos entonces. ¡No la querías y si te quedabas con ella solo por Dani, tu hijo crecería viendo y dándose cuenta de todo esto!

-¡Lo sé! No me arrepiento de haber roto. Me arrepiento de la forma en que manejé las cosas. Debería haberme preparado mejor, para que el ruido sordo no fuera tan fuerte.

—¿Pero qué piensas hacer?

-¡No sé! Suspiró. - ¡No quieren ninguna ayuda, así que no sé si puedo hacer algo!

Permanecieron en silencio por unos segundos y Poncho pudo ver el miedo en Anahí. Le sostuvo la cara y le dio un pequeño sello.

- ¡No tengo intención de volver con ella!